Nueva York. Hay un contingente de estadunidenses más grande en el cuadro masculino del Abierto de Estados Unidos que en cualquier otro momento del último cuarto de siglo. Podría ser también la mejor generación de los últimos años. Dos de los líderes —Taylor Fritz y Ben Shelton— dieron inicio al torneo el domingo con actuaciones dominantes.
Shelton, el cabeza de serie Nº 6 y dos veces semifinalista de Grand Slam, necesitó sólo dos horas, siete minutos para superar al clasificado Ignacio Buse de Perú por 6-3, 6-2, 6-4 en el primer encuentro en el Arthur Ashe Stadium.
Fritz, cuarto cabeza de serie, necesitó unos 10 minutos menos para avanzar con una victoria de 7-5, 6-2, 6-3 sobre otro estadunidense, Emilio Nava, un jugador inscrito como comodín.
En total, hay 23 hombres del país anfitrión en la lista, la mayor cantidad desde 1997. Hay 25 mujeres estadunidenses, lo cual no es un hito para un grupo que regularmente produce campeones y finalistas de Grand Slam.
“Creo que la competencia entre todos nosotros nos impulsa a todos y nos da motivación para ser mejores”, dijo Fritz.
Todos persiguen el mismo premio: el primer trofeo individual de Grand Slam para un estadunidense desde que Andy Roddick triunfó en Nueva York en 2003. Una meta complicada considerando que Jannik Sinner y Carlos Alcaraz se han combinado para ganar cada uno de los últimos siete títulos principales.
"En cuanto empiezas a mirar hacia adelante, tropiezas con tus propios pies", dijo Shelton, que perdió ante Sinner en las semifinales del Abierto de Australia en enero, ante Alcaraz en la cuarta ronda del Abierto de Francia en junio y ante Sinner en los cuartos de final de Wimbledon en julio.
Emma Raducanu ganó un partido en Nueva York por primera vez desde que ganó el Abierto de EU 2021, eliminando a Ena Shibahara por 6-1 y 6-2.
