Ciudad de México. El sueño de Daniel Suárez de convertirse en el primer piloto mexicano en conquistar una carrera de la máxima categoría de Nascar tendrá que esperar, sin embargo, logró afianzarse como un nuevo referente para la afición. Pese a no subir al podio en la carrera Viva México 250 al finalizar en el sitio 19, donde el neozelandés Shane van Gisbergen ganó la prueba, acompañado en el podio por Cristopher Bell y Chase Elliot, el regiomontano le devolvió al público la alegría de ver a un compatriota disputar un circuito del mejor nivel en el autódromo Hermanos Rodríguez, ante la nostalgia que provocó la salida de Sergio Pérez de Red Bull.
“Creo que hicimos historia de una manera impresionante, fue muy especial que todos nos hayamos dado cita aquí, en el autódromo más importante para mí, y que pudiera ser competitivo en ambas categorías para emocionar a los grandes aficionados que estuvieron en las gradas. Me voy muy contento, más no satisfecho, hubiera querido ganar ambas carreras” dijo Suárez.
Ante la actuación que brindó el sábado en la Xfinity Series con un auto de repuesto, la cual quedó grabada con letras doradas en la historia del serial , el mexicano tuvo hoy un reto mayor en una tarde nublada en la capital del país.
Un bólido azul con blanco rugió desde el décimo sitio de la parrilla, al volante se encontraba el regiomontano de 33 años, quien fiel a su estilo fue agresivo desde el inicio al escalar hasta el cuarto sitio. El olor a llanta quemada, el rugido ensordecedor de los motores y el rechinar de los neumáticos en los pits eran los protagonistas en el inicio de la prueba, la cual inauguró Jeff Gordon, leyenda del serial.
Si bien una parte del público sabía que el regiomontano era un piloto de Nascar, otro sector desconocía que corría en la máxima categoría. “Vine con mis papás a apoyar a Dani, ha corrido muy bien y ganó ayer aunque salió de hasta atrás. Me gustan mucho las carreras, no tenía una playera de su equipo pero traje la del Rayo McQueen para que le diera suerte”, comentó un infante antes de ingresar al autódromo.
A este ambiente se sumó la lluvia, que en las primeras vueltas provocó que aparecieran las banderas amarillas de precaución. El piloto del equipo Trackhouse Racing se mantuvo entre los primeros 10 lugares en la primera etapa de la prueba e ilusionó a los asistentes al arrancar como líder desde la vuelta 20, lo cual se esfumó en minutos y comenzó a rezagarse.
Si bien, el sábado demostró el motivo de la existencia de categorías al conquistar la Xfinity series pese a múltiples adversidades, ayer comprobó que debe trabajar para mantenerse en el máximo nivel del serial, pues en la etapa tres y cuatro de una carrera de 100 vueltas, el tricolor no pudo competirle a los líderes.
El triunfo de Van Gisbergen fue el primero de la temporada, su mejor resultado era un sexto puesto. Con el triunfo aseguró un puesto en los playoffs de Nascar Cup, mientras Suárez, por su parte, necesita ganar una carrera para asegurar la postemporada, que iniciará en Darlington el 31 de agosto.