Chilpancingo, Gro. Pobladores de la comunidad de Vallecitos de Zaragoza, municipio de Zihuatanejo, ubicado en la Costa Grande de Guerrero, denunciaron que presuntos integrantes del grupo delictivo La Familia Michoacana ingresaron desde el mediodía de este miércoles al poblado y causaron destrozos a sus viviendas, además dejaron personas heridas.

En un comunicado, señalaron que los presuntos delincuentes se metieron a las casas y causaron daños, apoyados supuestamente por elementos de la Guardia Nacional.

Demandaron el apoyo de la gobernadora morenista Evelyn Salgado Pineda y del gobierno federal. “Queremos que nos apoyen, que no nos dejen a nuestra suerte”, clamaron.

El escrito refiere que el grupo delincuencial, es comandado por José Alfredo Hurtado Olascoaga, alías ‘El fresa’, con apoyo de su hermano Johnny Hurtado Olascoaga, alías ‘El pez’, y por el ruso Oliver Coria Sánchez.

Los delincuentes, acusaron, “ se metieron a la mala en nuestro pueblo, apoyado por la Guardia Nacional; pedimos ayudar al gobierno del estado y federal que nos ayuden a parar esta guerra ya que toda la gente estamos asustados de lo que nos pueda pasar.

No podemos vivir así, tenemos muchos niños, y gente de la tercera edad aterrorizada por todo lo que están haciendo metiéndose con gente inocente”, manifestaron.

Le pedimos a “Evelyn Salgado que nos apoye junto con el gobierno de (la presidenta) Claudia Sheinbaum, no nos dejen a la suerte”.

Por su parte, habitantes de la comunidad de Zihuaquio, municipio de Coyuca de Catalán, ubicado en la Tierra Caliente de Guerrero, también solicitaron, vía telefónica, la intervención de la gobernadora debido a que desde los cerros les han estado disparando con armas de fuego, supuestos miembros del cártel de “las cuatro letras.”

Manifestaron también que los delincuentes presionan a los productores de mezcal, para que les vendan el litro a 150 pesos. Cuando su precio real es de mil pesos por litro.

“Ya hemos denunciado esta situación tanto al gobierno estatal, como al gobierno federal, pero no nos hacen caso, parece como si no existiéramos”, acusó un vecino.