París. Novak Djokovic avanzó a la cuarta ronda del Abierto de Francia con una victoria por 6-3, 6-4, 6-2 sobre el clasificado Filip Misolic el sábado por la noche en un partido marcado por el ruido de los aficionados del Paris Saint-Germain animando los goles mientras veían la final de la Liga de Campeones en sus teléfonos.
También se oían con frecuencia los fuegos artificiales provenientes del estadio del PSG, situado a pocas cuadras de la cancha Philippe-Chatrier. El club francés ganó su primer campeonato en la máxima competición europea de fútbol, al vencer al Inter de Milán de Italia por 5-0 en Múnich, Alemania.
Djokovic originalmente esperaba evitar jugar al mismo tiempo que el partido de futbol para poder verlo por televisión.
"Fue interesante. El público seguía el partido con mucha atención. Y pude oír cuando marcaban. Celebraban muchísimas veces", dijo Djokovic sobre los espectadores en las gradas de la Chatrier. "Pensé: ¡Guau, cuántos goles de París! ¿Qué pasa?. Ahora oí que el marcador era 5-0. Un resultado impresionante, la verdad".
Durante un largo punto de tenis en el tercer set, algunos gritos acompañaron el cuarto gol del PSG y, después, el juez de silla pidió a los espectadores con entradas de tenis que bajaran el volumen, lo que provocó abucheos y silbidos en respuesta.
“Las sesiones nocturnas siempre son diferentes. Siempre hay más ruido. La gente siempre está más emocionada. Todo siempre es ruidoso y diferente a una sesión diurna”, dijo Djokovic, quien ha ganado los nueve sets que ha jugado hasta ahora en el torneo de este año. “Sabía que tendría que programarme una vez para jugar de noche. Y no pasa nada. Está bien. Es decir, estaría viendo fútbol, seguro. ... (El PSG) ganó por primera vez, así que no sé cómo vamos a regresar a nuestros hoteles. Va a ser todo un viaje. Toda una aventura. Pero creo que nos espera una larga celebración y probablemente no dormiremos mucho esta noche. Supongo que es una noche divertida para estar en París”.
Djokovic nunca ha perdido contra un jugador tan bajo como Misolic, número 153 del ranking, en un torneo de Grand Slam, y este nunca estuvo en duda. Solo hubo un pequeño retraso para que tomara el control: en el segundo juego, con Misolic al servicio, Djokovic tuvo siete puntos de quiebre, pero no logró aprovechar ninguno.
Eso puso el marcador 1-1. Pero Djokovic siguió acumulando oportunidades de quiebre y, finalmente, aprovechó su décimo quiebre para ponerse 4-2 arriba. Eso fue todo.
Contra un hombre 15 años menor que él, que participaba en apenas su segundo torneo de Grand Slam, Djokovic, de 38 años, cometió solo 14 errores no forzados (en comparación con 33 ganadores) y salvó el único punto de quiebre que enfrentó.
"He estado sólido cuando lo he necesitado", dijo Djokovic. "Siempre hay algo que mejorar. Algo en lo que sobresalir. Pero en general, estoy satisfecho con el nivel de tenis hasta ahora".
Mejoró su récord de carrera en el Abierto de Francia a 99-16, igualando su número de partidos ganados en el Abierto de Australia.
Ha ganado tres de sus 24 grandes campeonatos en París. Hace un año, en una victoria en cuarta ronda, Djokovic se rompió el menisco de la rodilla derecha y tuvo que retirarse del torneo antes de su siguiente partido.