Los Cuervos de Baltimore, favoritos por 20 puntos en las casas de apuestas, cumplieron la tarea de vencer a los Cafés de Cleveland (35-10) para ganar el título divisional de la AFC Norte. Aunque pocas fueron las ganancias de los principales apostadores, el resultado se ajustó a los cálculos de quienes conocen el talento de Lamar Jackson, mariscal de campo del conjunto púrpura, cuya actuación coronó una temporada histórica al completar 16 de 32 pases para 217 yardas y dos touchdowns.

Jackson, candidato a ser nombrado Jugador Más Valioso de la edición 2024 de la liga, utilizó la última semana de la fase regular para demostrar su valía en los controles de Baltimore. Corrió nueve veces, desafió en el juego físico a la defensiva de Cleveland y se convirtió en el primer jugador en registrar más de 4 mil yardas de pase y 900 yardas terrestres en una sola campaña.

Con ese impulso de su mariscal de campo, Baltimore aseguró la condición de local en la ronda de comodines de los playoffs el próximo fin de semana contra los Cargadores de Los Ángeles o los Acereros de Pittsburgh. Si ya el boleto a la postemporada estaba seguro, ayer los Cuervos tuvieron su noche de celebración.

La única alerta roja fue la salida de Zay Flowers, recientemente seleccionado a su primer Pro Bowl, quien sufrió una molestia en la rodilla derecha a inicios del segundo cuarto y no pudo continuar las acciones. 

Como principal motor detrás de Jackson, Derrick Henry cerró una segunda parte con 130 yardas y dos anotaciones, lo que lo ubicó por encima de Tiki Barber (1,860 en 2005) en la lista de jugadores de 30 años o más con más yardas de carrera al totalizar 1,921 esta temporada. El camino de los Cuervos (12-5), ahora, luce prometedor.