Ciudad de México. En todo el sexenio, Petróleos Mexicanos (Pemex) habrá invertido 75 mil millones de pesos en el Sistema Nacional de Refinación (SNR), monto que es 47 por ciento mayor a los 51 mil millones que se destinaron en el sexenio pasado, reportó la empresa.

La inversión de 75 mil millones permitió incrementar el procesamiento de crudo 82 por ciento, y junto con la rehabilitación de las seis refinerías que operan en México, en enero de 2022 la petrolera compró la refinería Deer Park, con lo cual se incrementó el proceso de crudo en casi 280 mil barriles diarios al día, dijo Pemex en información entregada a la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados.

De esta manera, el procesamiento ya supera un millón 200 mil barriles por día, es decir, un incremento de 154 por ciento, respecto al procesamiento que había al inicio de esta administración.

“Consistentes en lograr la autosuficiencia de combustibles en el país, nos dimos a la tarea de rehabilitar las refinerías Cadereyta, Madero, Minatitlán, Tula, Salamanca y Salina Cruz, llevándolas de un proceso de crudo de 511 mil barriles diarios, en 2018, a un millón 31 mil barriles al mes de marzo”, destacó la empresa que dirige Octavio Romero Oropeza.

También precisó que Pemex proyecta que, en septiembre próximo cuando concluye la administración del presidente Andrés Manuel Lópe Obrador, y con la operación estable de la refinería Olmeca, el proceso de crudo alcanzará un millón 708 mil barriles al día, y para diciembre de este año un millón 724 mil barriles al día.

La petrolera invirtió además recursos para la construcción de dos coquizadoras, una en Tula y otra en Salina Cruz, pues de acuerdo con el director de la empresa, uno de los problemas de la refinación en México es que las refinerías producen mucho combustóleo, casi 30 por ciento, pero con estas obras se aprovechará ese recurso y se alcanzará la autosuficiencia en combustibles.

“En total, estas dos coquizadoras le van a agregar a Pemex 154 mil barriles de gasolina y diésel”, indicó.

En el caso de la coquizadora de Tula, en lugar de producir combustóleo, producirá 80 mil barriles de gasolina y diésel, con una inversión de más de cinco mil millones de dólares y se prevé que iniciará operaciones en julio de este año.

Mientras que la de Salina Cruz producirá 74 mil barriles entre gasolina y diésel, con un costo de tres mil 500 millones de dólares, y al cierre del sexenio tendrá un avance de 54 por ciento, y se prevé que esté completamente lista al cierre del año.