Ciudad de México. A raíz de que no hay información suficiente para que se pueda hacer la evaluación adecuada en temas ambientales, sociales y de gobierno corporativo (conocidos como criterios ASG) en economías emergentes, como México, se corre el riesgo de que se canalicen más recursos a países industrializados, en lugar de países emergentes, que es donde más se necesita el financiamiento para el combate al cambio climático, alertó Irene Espinosa, subgobernadora del Banco de México (BdeM).

La autoridad monetaria precisó que los mercados emergentes no están siendo calificados (ASG soberanos) en su justa medida y eso pone en riesgo que se les dé el financiamiento adecuado.

Durante su participación en el Foro Anual Finanzas Sostenibles México 2023: "Emergencia Climática y Transición Justa", organizado por el Consejo Mexicano de Finanzas Sostenibles (CMFS), Irene Espinosa dijo que “los países avanzados tienen más y mejor información, por eso es que no hay una evaluación adecuada”.

La subgobernadora del Banco de México dijo que hay investigaciones recientes que muestran que las calificaciones ASG soberanas y las calificadoras crediticias no reflejan plenamente el nivel de preparación de los países emergentes para transitar a una economía baja en carbono.

“Además, en el caso de países emergentes generalmente no son recompensados en sus calificaciones ASG soberanas por tener  buenas políticas en materia ambiental, particularmente, para el caso de países con ingresos medios y bajos, la calificación es negativa.

“A mejor desempeño ambiental, menor calificación de crédito soberano. La transversalización de los temas ASG conlleva el riesgo de desvío de recursos hacia países con mayores ingresos y puede acentuar la subrepresentación de países emergentes o en vías de desarrollo en los mercados de capitales globales”, afirmó Espinosa.

Con base a lo anterior, la subgobernadora destacó el trabajo del Consejo de Normas de Información Financiera (CINIF), que ha propuesto una hoja de ruta para la implementación de los estándares de sostenibilidad en México, aplicables a empresas de interés público y para pequeñas y medianas empresas.

“El CINIF tiene un conjunto de 30 indicadores para estas empresas en los tres pilares ASG, 16 ambientales, seis sociales y ocho de gobierno corporativo. El que las entidades públicas recopiles y divulguen estos indicadores ayudarán a favor de la sostenibilidad y así mejorar su calificación ASG. Y para que esta información sea útil a los inversionistas deberá estar disponible con una profundidad como la información financiera”, destacó Irene Espinosa.

Añadió que todos estos esfuerzos están encaminados al cambio climático, pues los fenómenos meteorológicos reducen significativamente el rendimiento agrícola, lo que necesariamente se traduce en un incremento en los precios de los alimentos, pues la población con menores ingresos destinan la mayor proporción de ellos a sus necesidades alimentarias y son ellos quienes resienten los efectos del cambio climático.