Ciudad de México. Los edificios entregados a la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México como reparación de daños del llamado cártel inmobiliario en la alcaldía Benito Juárez se destinarán a viviendas para damnificados del sismo de 2017, a familias de víctimas de feminicidios y algunos serán oficinas de las instituciones encargadas del combate a la corrupción, informó el gobierno capitalino.
Un ejemplo es el ubicado en avenida Insurgentes Sur 1774, colonia Florida, el primero que la fiscalía entrega a la administración central, donde se prevé instalar oficinas de enlace de la Fiscalía Anticorrupción, de la Secretaría de la Contraloría General, de la mesa de atención a las víctimas de la corrupción inmobiliaria, así como para las víctimas de delitos, informó el titular del Ejecutivo local, Martí Batres Guadarrama.
Se trata de una edificación exclusiva de oficinas con seis niveles valuado en 10 millones de pesos; es uno de los que entregaron los ex funcionarios Nicias Aridjis, quien fue director general de Obras y Desarrollo Urbano, así como Luis Vizcaíno Carmona, ex director general Jurídico y Gobierno, ambos juzgados y sentenciados por enriquecimiento ilícito.
Tras haber aceptado su responsabilidad en dicho delito, como acuerdo por reparación del daño entregarán inmuebles cuyo valor es de alrededor de 80 millones de pesos, aunque no se precisó el número de construcciones.
En el caso de los edificios con uso habitacional que sean entregados a la administración capitalina, se asignarán a damnificados del sismo de 2017 y a familiares de víctimas de feminicidio.
Batres reiteró que la investigación del llamado cártel inmobiliario en la alcaldía Benito Juárez continúa y se investiga la presunta participación de otros ex funcionarios: tres ex directores generales, dos ex directores de área e incluso un ex jefe delegacional, en referencia a Christian von Roehrich de la Isla, quien ya fue detenido.
Hasta ahora, la FGJ ha asegurado 40 inmuebles como parte de la investigación en torno a la corrupción en esa demarcación; sin embargo, aclaró que no todos se entregarán al gobierno capitalino, e incluso recordó que en algunos casos se valora la posibilidad de regularizar algunos inmuebles en los que se construyeron pisos de más para no afectar a quienes viven en ellos, pues compraron sus departamentos de buena fe.