Las participaciones federales recibidas por estados y municipios se encuentran rezagadas en 22 mil 500 millones de pesos respecto a lo estimado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para este año, la caída respecto a lo previsto es de 9.5 por ciento hasta febrero, reportó Fitch Ratings.
“La agencia prevé que el Fondo de Estabilización de Ingresos para Entidades Federativas (FEIEF) es insuficiente para subsanar una recepción menor por parte de los gobiernos subnacionales, y es necesaria la realización de ajustes presupuestales en el ejercicio del gasto”, advirtió la calificadora en un reporte.
A la par, a febrero de 2023, el comportamiento de la recaudación federal participable estuvo 14.5 por ciento debajo de lo estimado por Hacienda, y esta falta de ingresos para alimentar las participaciones se conjugó con que, a diciembre pasado, el saldo disponible en el FEIEF ascendía a 21.8 mil millones de pesos.
“Ante el agotamiento de FEIEF y de mantener una recaudación federal participable menor a la esperada, la agencia aprecia una dificultad mayor para que el fondo de estabilización se potencie financieramente en 2023, como sucedió en 2009 y 2020, cuando las participaciones federales cayeron significativamente”, alertó la calificadora.
Recordó que en 2020, el FEIEF contaba con un saldo cercano a 60 mil millones, y para enfrentar la expectativa de una recaudación federal participable menor, se potenció financieramente para obtener recursos adicionales por hasta 80 mil millones. En la coyuntura actual la baja en ingresos han limitado su fondeo.
Fitch consideró que una reducción en los ingresos traerá para los gobiernos subnacionales presiones adicionales a los efectos inflacionarios e incrementos históricos en la tasa de interés que pagan por sus obligaciones financieras, lo que obliga hacer ajustes al gasto para mantener balances presupuestarios sostenibles.
La agencia adelantó que se “mantendrá observante del impacto sobre la calidad crediticia de las entidades calificadas, así como en sus financiamientos que emplean participaciones federales como fuente de pago para servir a la deuda”.