Ciudad de México. El uso de plásticos deja en el mundo una alta huella de carbono con la producción, grandes desechos, contaminación, daño a la vida silvestre y a los ecosistemas, además de costos socioeconómicos considerables debido a los impactos negativos de la basura de ese origen en el turismo y la pesca, aseguró la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).
Por ello, el organismo se dijo listo para ayudar a los gobiernos a hacer una transición mediante la implementación de mejores políticas para eliminar los impactos ambientales negativos de la producción de plásticos y, en última instancia, lograr océanos y ríos libres de plásticos para las generaciones futuras.
De acuerdo con el reporte "Perspectiva mundial del plástico: Impulsores económicos, impactos ambientales y opciones de política", la pandemia de covid-19 aumentó los desechos plásticos de un solo uso, aunque el uso de plásticos disminuyó en general debido al cierre de las actividades económicas.
“A medida que la economía se recupere, se prevé que el uso de plásticos aumente nuevamente, lo que conducirá a un crecimiento renovado de los desechos plásticos y las presiones ambientales relacionadas”, dijo la OCDE.
Con el fin de reducir el uso del plástico, la OCDE propuso cuatro claves, que son tener mercados de plástico reciclado; innovación tecnológica para cadenas de valor del plástico; medidas de políticas más coherentes y ambiciosas y una mayor cooperación internacional.
“El reciclaje tiene un papel importante que desempeñar en la reducción de la huella ambiental de los plásticos, desviando material de prácticas de gestión de residuos más dañinas y ayudando a disminuir la demanda de equivalentes primarios. Los plásticos secundarios del reciclaje actualmente solo representan el 6 por ciento de la materia prima para nuevos plásticos producidos a nivel mundial”, consideró la OCDE.
El organismo también recomendó que los países del mundo tomen más acciones para impulsar la innovación para un ciclo de vida de los plásticos más circular.
“La innovación puede generar beneficios ambientales significativos a lo largo del ciclo de vida de los plásticos, por ejemplo, al reducir la cantidad de material virgen necesario, prolongar la vida útil de los materiales y facilitar el reciclaje.
"La innovación en la prevención y el reciclaje de residuos representó solo el 1.2 por ciento de la innovación en plásticos en 2017. Se necesitan políticas más ambiciosas para orientar el cambio tecnológico hacia el cierre de los ciclos de los plásticos y la reducción de las fugas al medio ambiente”, apuntó.
Asimismo, la OCDE hizo un llamado a fortalecer la ambición de las políticas públicas internas para el tema.
“Las políticas públicas son una palanca clave para reducir las consecuencias ambientales del uso de plásticos. Sin embargo, el panorama actual de la política de plásticos está fragmentado y puede fortalecerse significativamente. Para mejorar las tasas de reciclaje y reducir las fugas, se necesita una mayor implementación de instrumentos económicos bien conocidos, como los esquemas de responsabilidad extendida del productor para empaques y bienes duraderos, impuestos sobre vertederos, depósito-reembolso y sistema de pago por uso”, destacó.