°C -
|

La Jornada

Últimas noticias
Anuncio
Anuncio

Cohete ruso se acopla en tiempo récord a la EEI

Foto autor
Afp
14 de octubre de 2020 10:06

Almaty. Una nave Soyuz con los cosmonautas rusos Serguéi Ryjikov y Serguéi Kud-Svershkov y la astronauta estadunidense Kathleen Rubins a bordo se ha acoplado este miércoles a la Estación Espacial Internacional (EEI) en un tiempo récord, tan solo 3 horas después del despegue.

El cohete ruso Soyuz MS-17 se "acopló" según lo previsto a las 08h48 GMT a la Estación Espacial, indicó la agencia espacial rusa Roskosmos en un comunicado.

"Se ha establecido un nuevo récord (...) El tiempo total entre el lanzamiento y el acople fue de 3 horas y 3 minutos", agregó.

Con este récord, se redujo a la mitad el tiempo de los vuelos tripulados hacia la EEI, que antes tardaban como mínimo seis horas. El viaje ha sido posible gracias a un nuevo sistema de guiado de los cohetes Soyuz.

El despegue de esta nave rusa hacia la Estación Espacial es el primero desde que el pasado 30 de mayo el cohete estadunidense SpaceX rompiera nueve años de monopolio ruso en los viajes a la EEI, logrando despegar desde el Centro Espacial John F. Kennedy (Florida).

La EEI sigue siendo sin embargo uno de los escasos ejemplos de cooperación entre rusos y occidentales. Los astronautas de ambos países han resaltado la capacidad que tienen los viajes espaciales para unir a naciones rivales por una causa común.

Imagen ampliada

Nuevo estudio revela la técnica que usaron los Rapa Nui para mover las estatuas moai

Según los investigadores, actualmente no existe ninguna otra teoría que explique cómo fueron desplazadas.

Premio Nobel de Química 2025 al japonés Susumu Kitagawa, al británico Richard Robson y al jordano Omar M. Yaghi

Los galardonados han utilizado la estructura molecular "metalorgánica" para captar agua del aire del desierto, extraer contaminantes del agua, capturar dióxido de carbono y almacenar hidrógeno.

Deforestación del Amazonas seca los 'ríos voladores' que riegan Sudamérica

Un nuevo análisis advierte que la deforestación implacable está interrumpiendo ese flujo de agua y sugiere que la continua pérdida de árboles empeorará las sequías en el suroeste del Amazonas.
Anuncio