Phoenix. Con el fin de detener un enorme aumento de casos nuevos de coronavirus, el gobernador de Arizona, Doug Ducey, ordenó que bares, centros nocturnos, gimnasios, cines y parques acuáticos del estado permanezcan cerrados por lo menos 30 días a partir de la noche del lunes.

El gobernador republicano también ordenó que las escuelas públicas demoren el inicio de clases por lo menos hasta el 17 de agosto.

Muchos distritos planeaban comenzar el año escolar a finales de julio o principios de agosto.

Ambas órdenes podrían extenderse si el número de casos nuevos de COVID-19 no baja.

La mayoría de los bares y centros nocturnos abrieron después de que a mediados de mayo expiraron las órdenes estatales de quedarse en casa y de cierre de negocios.

Los funcionarios de salud de Arizona reportaron el domingo 3.858 nuevos casos confirmados de coronavirus, hasta el momento la cifra más alta para un solo día en el estado y la séptima vez en los últimos 10 días en que los casos diarios superan los 3.000.

Desde que inició la pandemia, se han reportado en Arizona 74.500 casos y 1.588 muertes a causa del virus.

Los hospitales del estado comenzaron a activar planes para incrementar su capacidad para atender a pacientes de coronavirus conforme aumentan los casos confirmados y más personas buscan tratamiento.

El gobernador también restablece una prohibición a las reuniones de más de 50 personas, y el departamento estatal de licores pondrá fin a la emisión de permisos de alcohol para uso especial. Las ciudades y condados podrán emitir sus propios permisos si aseguran que se cumplen reglas especiales.

La mayoría de los cines permanecen cerrados, pero la orden cierra aquellos que reabrieron y evita que otros reabran.