Para un jugador que era demasiado lento e inmóvil al salir de la universidad —lo que derivó en que fuera seleccionado apenas en el puesto 199 del draft—, la estatua parece algo apropiada.
El veterano pasador comandó a la ofensiva de su equipo para imponerse a Nueva Inglaterra y así conseguir su segunda victoria consecutiva de la temporada (2-1).