En una nueva cúpula líquida en un futurista observatorio subterráneo ubicado en las colinas de China, los físicos contienen estas esquivas partículas con la esperanza de que develen secretos científicos ocultos.
Los pobladores de la región asociaban el blanco, el negro, el rojo, el amarillo y el azul/verde con el centro del universo y los cuatro puntos cardinales.