San Cristóbal de Las Casas, Chis. Como si fuera una novia que lleva al altar, Carlos Courtois Guillén cuida su vehículo Hudson modelo 1937 (tiene 88 años de antigüedad), que desde hace algunas décadas renta para bodas o 15 años.
Impecablemente blanca, la unidad descapotada llama la atención de propios y extraños cada vez que rueda por las calles de esta ciudad que dentro de 28 meses cumplirá 500 años de su fundación.
“Este vehículo lo compré hace 45 años en Monterrey, pero no sé quién fue el primer dueño. Está en perfectas condiciones; viajo en él a Tuxtla Gutiérrez, Comitán, Villahermosa. Levanta 80 o 90 kilómetros por hora”, dice su dueño.
“Es original y está muy bonito. Se enchina la piel cuando uno lo mira. Me buscan seguido para bodas o 15 años, pero creo que ya me voy a retirar porque ya cumplí mi deber aquí”, afirma Courtois Guillén, mientras espera frente a la catedral a que salgan los novios originarios de Tapachula que decidieron viajar a San Cristóbal para contraer nupcias la tarde del sábado 8 de noviembre.
Muchas personas se detienen frente al carro que relumbra ante el intenso sol del mediodía. “¿Me puedo tomar una foto?”, “¿Qué modelo es?”, “¿Le funciona todo?”, preguntan los curiosos transeúntes, muchos de los cuales hacen una especie de semicírculo para admirar la unidad, ajenos a la ceremonia religiosa que realiza el sacerdote adentro de la catedral.
Desde que San Cristóbal, ciudad turística y colonial ubicada a 2 mil 200 metros de altura, comenzó a ponerse de moda para la celebración de bodas (parejas de distintas partes llegan para casarse aquí), a Carlos le va mejor. Dice que los templos más usados para casamiento y 15 años son la catedral, El Carmen, La Merced, San Francisco y Santa Lucía.
-¿Cuánto cobra por la renta de este carro? -se le pregunta.
-El contrato es por tres horas y cobro mil 100 pesos por hora. Voy por la novia y la llevo a la iglesia. Espero una hora a que salgan ya casados y los llevo al local en el que se realiza la fiesta. Llevo 45 años dando este servicio.
“Me contacto con personas que se dedican a organizar eventos como bodas para la renta del carro. Ellos me buscan. En diciembre me contratan para dos o tres bodas”, expresa.
Dice que le gusta mucho su trabajo, “pues ya no tengo nada qué hacer. Anoche (de viernes para sábado) me vine de Teopisca (donde radica) para limpiarlo, arreglarlo y que no nos vaya a fallar a la hora de llevar a los recién casados. Terminando de hacer cositas me regreso a mi ranchito”.
Recargado en el carro, de saco y de sombrero, de baja estatura, Carlos cuenta que es modelo 1937, marca Hudson. “En México y Estados Unidos sólo quedan siete unidades de este tipo. Tres están vigentes y caminando; las demás no. Tiene tres velocidades y la reversa. Se le pone gasolina normal”.
-¿Es buen carro?
-Sí. Muy bueno. Subiéndome me agarro del chongo con cualquier carrito nuevo. Como sólo tiene tres velocidades sube uno tendido. Es muy estable.
“Tengo otro carro antiguo marca Ford en el que mataron a Pancho Villa. Es modelo 1936, pero no funciona porque se me desbieló”, afirma, al tiempo de señalar que está inscrito en un club de restauradores de autos antiguos. “Estoy buscando comprar un carro que está en el municipio de Las Rosas (Chiapas) en el que andaba el Santo”, el histórico luchador mexicano.
-¿No le dan ganas de casarse con tantas novias que sube a su carro?
-Me acabo de casar. Je, je. Tengo una muchacha de 52 años.