Kandil.- El Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) anunció este domingo que retirará todas sus fuerzas de Turquía hacia el norte de Irak, instando también a Ankara a tomar "sin demora" medidas legales para salvar el proceso de paz iniciado hace un año.
Turquía acogió con satisfacción este anuncio, considerándolo un "resultado concreto" de los esfuerzos por poner fin a un conflicto que dura ya cuatro décadas. El movimiento kurdo difundió simultáneamente una foto en la que, de acuerdo con él, aparecen 25 combatientes, entre ellos ocho mujeres, que se encuentran ahora en el norte de Irak tras abandonar Turquía.
Por la mañana no se confirmó el número de combatientes implicados en esta retirada, pero los observadores lo estiman entre 200 y 300. Tras las conversaciones indirectas iniciadas en octubre de 2024, el PKK, considerado como una organización terrorista por Ankara, anunció en mayo su disolución, respondiendo a un llamamiento en este sentido de su líder histórico Abdullah Öcalan, en prisión desde 1999.
De acuerdo con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, esta violencia causó 50 mil muertos, entre ellos 2.000 soldados, y provocó pérdidas por valor de miles de millones de dólares a la economía turca.
El PKK afirma que quiere defender los derechos de la minoría kurda en Turquía por la vía democrática, tal y como pidió Öcalan, e instó a Turquía a tomar las medidas legales necesarias para continuar con el proceso de paz y permitir la integración de sus militantes en la vida política.
"Queremos leyes específicas para este proceso (de paz), no sólo una amnistía" para los miembros del PKK, declaró a la prensa Sabri Ok, un dirigente del movimiento, subrayando la importancia de que estas medidas garanticen la "libertad".