Ciudad de México. Bancos, refresqueras, apuestas en línea, videojuegos, fintechs y plataformas de comercio electrónico se encuentran entre los sectores donde la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) propone aumentar las tasas de impuestos que se cobran o eliminar exenciones fiscales que favorecen la evasión. Esto en un abanico de medidas que pretenden incrementar la recaudación “ sin la necesidad de crear nuevos impuestos generales”, expuso.
La administración de Claudia Sheinbaum Pardo busca hacerse de ingresos presupuestarios por 8 billones 721.1 millones de pesos para el próximo año, una parte importante del impulso vendría del impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS) –el que se cobra a gasolinas, bebidas azucaradas y cigarros– y del impuesto general a la importación, de acuerdo con la Iniciativa de Ley de Ingresos 2026, presentada ayer al Congreso y que forma parte del paquete económico para el próximo año.
Hacienda proyecta que con una serie de “impuestos saludables”, la recaudación por IEPS avance 10 por ciento anual y que la recaudación por importación –debido al trabajo que se planea en aduanas– dé un salto anual de 40 por ciento, de acuerdo con la propuesta de paquete económico presentada por Hacienda al Congreso.
Plantea la aplicación de "aranceles estratégicos" para los productos que lleguen de los países con los que México no tiene acuerdos comerciales.
La propuesta fiscal presentada por Hacienda es una crónica anunciada desde hace semanas por el gobierno federal. De entrada se expone un paquete de “impuestos saludables”, que de acuerdo con la dependencia busca “fomentar hábitos de consumo más saludables entre los mexicanos”, así como la eliminación de beneficios a bancos por la inversión en bonos que son herencia del rescate bancario de los noventa del siglo pasado.
Con ese fin, la Iniciativa de Ley de Ingresos de la Federación presentada al Congreso propone “incrementar la cuota a 3.0818 pesos por litro de producto (en bebidas saborizadas), incluyendo aquellas que contienen cualquier tipo de azúcares no calóricos. Para los tabacos labrados, se propone aumentar la tasa ad valorem de 160 a 200 por ciento, así como establecer un incremento gradual de la cuota específica hasta 2030, con un periodo de transición entre los ejercicios fiscales de 2026 a 2029, además de incorporar los nuevos productos que contienen nicotina (denominadas “bolsas de nicotina”). En cuanto a los tabacos hechos a mano, se propone elevar la tasa ad valorem a 32 por ciento”.
Hacienda argumenta que busca desincentivar el consumo de estos productos, dado que las bebidas saborizadas ha contribuido a que 76.2 por ciento de la población mayor de 20 años presente sobrepeso u obesidad, condiciones asociadas con enfermedades como diabetes, padecimientos cardíacos, cáncer, osteoartritis y trastornos metabólicos; a la vez, el consumo de tabaco se asocia con el fallecimiento de 63 mil personas al año.
Pero más allá, el costo de atención médica derivado de estas enfermedades es de 116 mil millones de pesos anuales –prácticamente del doble del presupuesto en Salud previsto en el Presupuesto de Egresos de la Federación para el próximo año, de 66 mil 825.8 millones de pesos–, según los mismos documentos del paquete económico.
Estos impuestos saludables no se quedan en el consumo de bebidas y tabaco, Hacienda también propone impuesto especial ad valorem del 8 por ciento a la prestación de servicios digitales de videojuegos con contenido violento y aumentar el impuesto ad valorem de 30 a 50 por ciento sobre el monto total de las apuestas o la cantidad efectivamente percibida”, detallan los Criterios Generales de Política Económica.
Hacienda también acusó la fintechs de no retener y enterar el ISR y el IVA, correspondiente a las operaciones en las que participan como intermediarias” por lo que se propone establecer medidas que fortalezcan dicha obligación”. A la vez, se busca una tasa fija de retención provisional de 0.90 por ciento aplicable a inversiones, con base en el monto del capital que dé lugar al pago de los intereses, no sólo en este tipo de intermediarias financieras.
Como adelantó la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo la semana pasada, se propone que tres cuartas partes de las aportaciones al Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (antes FOBAPROA) no sean deducibles para efectos de impuesto sobre la renta. A la vez que se elimine el régimen especial por el que los bancos pueden reducir créditos incobrables.
En cuanto a las plataformas digitales, Hacienda propone unificar la tasa de retención con la máxima de 2.5 por ciento del Régimen Simplificado de Confianza de personas físicas. Adicionalmente, se propone una retención de 4 por ciento a las personas morales que obtengan ingresos mediante plataformas de intermediación de bienes, y de 20 por ciento a aquellas que no proporcionen el Registro Federal de Contribuyentes (RFC).
“En cuanto al IVA, se aplicará un esquema de retención del 8 por ciento cuando se cuente con RFC y de 16 por ciento en caso contrario, para personas morales; así como de 16 por ciento para residentes en el extranjero sin establecimiento en México y para las personas a quienes les depositen los pagos en cuentas bancarias o de depósito en el extranjero, por concepto de las operaciones realizadas en territorio nacional”, detalló Hacienda.
También, con el fin de promover el cumplimiento voluntario de las obligaciones tributarias, Hacienda propone actualizaciones a la tasa de recargos aplicables al pago de los créditos fiscales, que esta se fije en 1.38 por ciento mensual sobre saldos insolutos y si se liquida el adeudo con el Servicio de Administración Tributaria en parcialidades las tasas correspondientes serían de 1.42 por ciento mensual para plazos de hasta 12 meses; 1.63 por ciento mensual para plazos mayores a 12 meses y hasta 24 meses; y 1.97 por ciento mensual para plazos superiores a 24 meses.
Pero no todo son más actualizaciones de tasas de impuestos, la dependencia también propone estímulos fiscales para impulsar el Plan México. “Se plantea otorgar un beneficio a las personas físicas y morales que retornen recursos de procedencia lícita al país, siempre que estos hayan permanecido en el extranjero hasta el 8 de septiembre de 2025. Este beneficio consiste en pagar el ISR a una tasa del 15 por ciento, sin deducción alguna, con la condición de que dichos recursos sean invertidos en actividades productivas, por un periodo de al menos tres años”, explicó.
También se darán beneficios fiscales para incentivar la donación de libros a diversas entidades y organismos y se propone liberar de cargas tributarias y administrativas a las personas físicas y morales que participen en la organización, desarrollo y realización de actividades vinculadas con la Copa Mundial de la FIFA 2026.
En este punto, también como una formas de “consolidar un modelo económico soberano que impulse el desarrollo productivo y la competitividad de sectores estratégicos para el país”, Hacienda replica la política comercial de Estados Unidos, con Donald Trump, y plantea “aranceles estratégicos a países con los cuales no existen acuerdos vigentes”.