Chilpancingo, Gro. Campesinos, ganaderos, comerciantes, charros, académicos, amas de casa, niñas y niños, realizaron un performance para recordar la llegada del General José María Morelos y Pavón a la Villa de Chilpancingo (como se conocía en esa época a la capital de Guerrero), para instalar el Primer Congreso de Anáhuac el 13 de septiembre de 1813, en donde se dieron a conocer los Sentimientos de la Nación.

Entre ¡Vivas!, aplausos y la algarabía del pueblo de Chilpancingo, a los héroes de la Revolución de Independencia Morelos, Guerrero, Álvarez, y Pedro Ascencio de Alquisiras, entre otros, los improvisados actores montados en sus caballos, recorrieron las calles y recordaron este pasaje de la historia, que concluyó con la ofrenda encabezada por Morelos, y sus compañeros de guerra, depositaron respetuosamente ante una imagen de la Asunción de María, en la catedral del mismo nombre.

El médico veterinario, Mario Raúl Valenzo Hernández, tomó su papel de Morelos muy en serio, y al llegar a las puertas de la catedral de la Asunción de María expresó parte de la arenga del generalísimo al llegar a Chilpancingo: les habla José María Morelos y Pavón, para servirle a Dios y a la santísima causa de la libertad, he de decirles, que estamos luchando por el nacimiento de una nación independiente; donde la virtud mida al casto y al vicioso, en donde no hay otra nobleza, porque todos somos iguales, pues del mismo origen procedemos.

Que no haya abolengos, ni privilegios; no es racional que existen esclavos tan sólo por el color del rostro; porque el color del rostro, no es el mismo al del corazón y el pensamiento; que la esclavitud se proscriba para siempre; que se modere y se distinga la opulencia y la indigencia. No hay mejor gobierno, que aquel que haga feliz a la mayoría de sus individuos; ni hay peor aquel que día a día aumente el número de desdichados ¡viva México Independiente!

Al respecto, Francisco Arzola Jaramillo, el único actor profesional y actual director del grupo Teatro Guerrerense Universitario de la Universidad Autónoma de Guerrero, se refirió a este trabajo desarrollado durante 11 años consecutivos como “la representación de un hecho histórico que cambió el rumbo de nuestro país, como fue la entrada del generalísimo Morelos a la Villa de Chilpancingo, para instalar el Primer Congreso de Anáhuac.

Es para revivir la memoria de lo que es la nación mexicana, y los ideales de justicia e igualdad y que la opulencia no esté por encima de la ética y la virtud de los mexicanos, es el mensaje al recordar este pasaje histórico, en estos momentos y en medio de la violencia en que vivimos, y sobre todo potenciar a Chilpancingo, como la cuna de México”.