Nueva York. En su tercera final de Grand Slam consecutiva, el español, Carlos Alcaraz, derrotó al italiano, Jannik Sinner, y se proclamó campeón del Abierto de Estados Unidos por segunda vez.
El murciano reafirmó su superioridad sobre el monarca defensor y además, le arrebató el primer puesto del ranking ATP para dejar a los aficionados al tenis con ganas de saber cuándo será su próximo enfrentamiento.
“Te veo más que a mi familia”, bromeó Alcaraz durante la ceremonia de entrega de trofeos, provocando una sonrisa en Sinner. “Es genial compartir la cancha, los vestuarios, todo”.
Jannik y Carlos son los primeros dos hombres en la historia del deporte que se enfrentan en tres finales de Grand Slam consecutivas en una sola temporada.
La victoria de 2 horas y 42 minutos le dio a Alcaraz, un español de 22 años, una ventaja sobre Sinner, un italiano de 24 años, de 10-5 en su serie cara a cara, 6-4 en trofeos totales de Grand Slam y 2-1 en campeonatos del US Open
El inicio del partido se retrasó aproximadamente media hora mientras miles de fanáticos estaban atrapados afuera del estadio Arthur Ashe pasando por seguridad adicional porque el presidente, Donald Trump, estaba sentado en la suite de un patrocinador. El mandamás estadunidense recibió algunos vítores pero también muestras de descontento de los asistentes.
“Fuiste mejor que yo”, dijo Sinner. “Hoy lo hice lo mejor que pude. No pude hacer más”.
Entre ambos han conseguido ocho trofeos de Grand Slam (cuatro cada uno) y 10 de 13. Novak Djokovic, el 24 veces campeón de Grand Slam eliminado por Alcaraz el viernes, se llevó los otros tres.
Tanto Sinner, que había ganado sus últimos 27 partidos en cancha dura en torneos importantes, como Alcaraz ofrecieron el domingo destellos de por qué son tan buenos, aunque fue raro que ambos estuvieran en su mejor momento simultáneamente.
Carlos, que acabó con el doble de golpes ganadores, 42-21, estuvo soberbio en el primer, tercer y cuarto sets; las mejores actuaciones de Sinner llegaron en el segundo.
Jannik, que estaba invicto en sus últimos 27 partidos en Grand Slams de pista rápida, falló en su intento de ser el primero en revalidar el trofeo desde los cinco ganados por Roger Federer entre 2004 y 2008.