Nuevo Laredo, Tamps. El combate al VIH en ese municipio fronterizo ha dejado de limitarse a clínicas y hospitales. Hoy, brigadas del Centro Ambulatorio para la Prevención y Atención en SIDA e Infecciones de Transmisión Sexual (Capasits) recorren espacios públicos, eventos masivos y colonias vulnerables para acercar la detección oportuna a la población.
En lo que va del año, se han confirmado 37 nuevos casos de VIH en esa ciudad, mientras que 381 personas ya reciben tratamiento y acompañamiento médico en el Capasits. No obstante, el subregistro y los diagnósticos tardíos siguen siendo un obstáculo serio para reducir el impacto de esta enfermedad.
“El principal enemigo sigue siendo el silencio. Muchas personas no se sienten mal y por eso no se hacen la prueba. Nuestro trabajo es llevarles el servicio, romper esa barrera inicial”, señaló Juan Francisco Ortiz Brizuela, responsable jurisdiccional del programa VIH-SIDA, ITS y Hepatitis C en Nuevo Laredo.
La estrategia del Capasits incluye pruebas rápidas y confidenciales, atención inmediata en caso de resultado positivo y también la oferta del tratamiento preventivo PrEP (Profilaxis Pre-Exposición) para quienes se encuentran en alto riesgo de adquirir el virus. Este tratamiento, explicó Ortiz Brizuela, se administra de forma controlada y gratuita.
El programa también hace énfasis en la educación sexual integral, la promoción del uso correcto del condón y la sensibilización para erradicar el estigma. “La prevención no solo es médica. También es social, cultural. Necesitamos que la gente pierda el miedo y entienda que el VIH ya no es una sentencia de muerte si se detecta a tiempo”, afirmó el especialista.
Los servicios del Capasits están disponibles de forma gratuita y sin necesidad de seguro médico. Además de sus instalaciones en la colonia Voluntad y Trabajo III, las brigadas móviles seguirán visitando distintos sectores de la ciudad. “Queremos llegar antes que el virus. Y eso solo se logra con prevención activa y comunidad informada”, concluyó Ortiz Brizuela.