Washington. La confianza de los consumidores estadunidenses mejoró en julio, pero está muy por debajo de los niveles del año pasado y los hogares creen que existe un riesgo considerable de que aumenten las presiones sobre los precios en el futuro.
La Encuesta de Consumidores de la Universidad de Michigan mostró el viernes que su Índice de Confianza del Consumidor subió a 61.8 este mes, desde una lectura final de 60.7 en junio. Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado un alza hasta 61.5.
Sin embargo, esta cifra es casi 7 por ciento inferior a la de julio de 2024, e incluso 16 por ciento más baja que la registrada en diciembre, señala la universidad.
“Es poco probable que los consumidores recuperen su confianza en la economía a menos que se sientan seguros de que es improbable que la inflación empeore, por ejemplo si la política comercial se estabiliza en un futuro previsible”, dijo en un comunicado Joanne Hsu, directora de las Encuestas de Consumidores.
“En este momento, las entrevistas revelan pocos indicios de que otros acontecimientos políticos, incluida la reciente aprobación de la ley de impuestos y gastos, hayan movido mucho la aguja en la confianza de los consumidores”, agregó.
Las expectativas de inflación a 12 meses de los consumidores cayeron de 5 por ciento en junio a 4.4 por ciento en julio, mientras que las de largo plazo bajaron de 4 por ciento el mes pasado a 3.6 por ciento.
“Ambas lecturas son las más bajas desde febrero de 2025, pero se mantienen por encima de diciembre de 2024, lo que indica que los consumidores siguen percibiendo un riesgo sustancial de que la inflación aumente en el futuro”, comentó Hsu.