Oklahoma City. Con una anotación de Tyrese Haliburton en el último suspiro, los Pacers de Indiana derrotaron 111-110 al Thunder de Oklahoma City en el primer partido de las finales de la NBA, una remontada histórica.

Los Pacers perdían por 15 puntos cuando restaban 9:42, igualando la mayor remontada en un último cuarto en un partido de finales desde que Dallas superó una desventaja de 15 puntos para vencer a Miami el 2 de junio de 2011.

Pese a ello, Indiana encontró la forma de conseguir la victoria. Revestidos de blanco, los aficionados locales no pudieron contrarrestar con sus vítores el impetud de los “reyes de las remontadas de último minuto” en estos playoffs, que tras 25 años sin disputar juegos decisivos estamparon su nombre en los 0.3 segundos del final y consiguieron reponerse en el marcador para tomar ventaja en la serie.

Shai Gilgeous-Alexander había sido el principal jugador del encuentro al anotar incluso 38 puntos para el Thunder; mientras que Pascal Siakam impulsó a los Pacers con 19 unidades.

Si bien el desempeño de ambos fue trascendental para desatar un encuentro trepidante, Haliburton terminó como el protagonista al salvar a la franquicia de Indiana con ese arriesgado tiro que definió el encuentro.

Así, una vez más, Indiana encontró la manera de salir avante en en el tramo final, tal como lo hizo hace unos semanas ante Milwaukee, Cleveland y Nueva York. El siguiente juego de la serie entre los Pacer y el Thunder será el próximo domingo.