El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, solicitó este viernes a la FIFA y a la Confederación Sudamericana de Futbol (Conmebol) una sanción ejemplar por el caso de racismo que afectó a futbolista Luighi, del club Palmeiras, quien fue víctima de insultos raciales por parte de aficionados del club paraguayo Cerro Porteño durante un partido por la Copa Libertadores Sub-20.

"Todo el apoyo a nuestro joven Luighi, de Palmeiras, víctima de un acto racista en Paraguay. El futbol significa trabajo colectivo, superación y respeto. Racismo significa el fracaso de la humanidad. Basta de odio disfrazado de rivalidad. El mundo no puede tolerar más este tipo de violencia que hiere la dignidad y la esperanza en nuestra juventud", dijo el presidente de Brasil.

El futbolista brasileño de 18 años fue agredido luego de que los hinchas de Cerro Porteño hicieran gestos de un mono en su dirección durante la victoria de Palmeiras 3-0 contra los locales en el encuentro celebrado el jueves en la ciudad de San Lorenzo, cerca de Asunción, Paraguay.

Lula da Silva además pidió que "sean responsabilizados en forma ejemplar" los autores del delito de racismo a la FIFA, a la Conmebol y a la Confederación Brasileña de Futbol (CBF).

Por su parte, la Conmebol publicó en su cuenta de la red social X que "rechaza tajantemente cualquier acto de racismo" y que se "implementarán las correspondientes medidas disciplinarias".

Vinicius respalda

El brasileño Vinicius Jr, estrella del Real Madrid, respaldó a los juveniles y se sumó a las críticas a la Conmebol. "Ustedes nunca hacen nada. NUNCA!!!!", escribió Vini en una historia de Instagram dirigida a la entidad.

Vinicius se convirtió en un símbolo de la lucha contra el racismo tras ser víctima de varios episodios ofensivos en el campo. Una agresión en su contra terminó en junio del año pasado en una condena histórica de ocho meses de prisión contra tres hinchas del Valencia.