Ciudad de México. El acuerdo al que llegó el gobierno mexicano con Iberdrola el martes pasado abre una nueva etapa en las inversiones que realizarán las empresas privadas de energía en México, con un enfoque primordial en las renovables, afirmó la Asociación Mexicana de Energía (AME).
La Asociación manifestó su “absoluta disposición” para mantener una interlocución entre los sectores público y privado, con el objetivo principal de “impulsar la inversión en el sector eléctrico que requiere el país”.
“La AME celebra que el acuerdo anunciado por el gobierno represente el inicio de una nueva etapa en la que el sector privado es bienvenido a invertir en el desarrollo de energías renovables en el país, bajo la tutela del Estado”, dijo dicha Asociación en un comunicado.
El martes pasado, el gobierno dio a conocer que llegó a un acuerdo para comprar a Iberdrola un total de 13 plantas de generación eléctrica, de las cuales, 12 son de ciclo combinado. La transacción rondará los 6 mil millones de dólares, y permitirá que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) despache el 55.5 por ciento de la electricidad que se consume en el país.
Lo anterior está en línea con la política que busca el gobierno actual, la cual consiste en que las empresas productivas del Estado en el sector energético tengan la mayoría de la participación en el mercado de electricidad y petróleo.
“El sector privado podrá aportar su experiencia, recursos tecnológicos, financieros y humanos para aumentar la capacidad de generación del país, contribuir a un suministro eléctrico confiable, accesible y sustentable, lo que permitirá atraer inversiones y mejorar la competitividad y eficiencia de la industria nacional”, puntualizó la AME.
También reiteró un “compromiso de promover el desarrollo de un sector eléctrico que beneficie a México, basado en la certeza jurídica, y que permita aprovechar las grandes oportunidades que ofrecen la atracción de inversiones y el crecimiento del mercado interno, para el desarrollo económico y social de los mexicanos”.
