A muchos funcionarios les preocupa que los aranceles aumenten las presiones sobre los precios con el tiempo, lo que desaconseja relajar la política monetaria.
“Si los nuevos datos siguen mostrando que la inflación se está moviendo de forma sostenible hacia nuestro objetivo de 2 por ciento, será apropiado bajar gradualmente la tasa de interés", dijo Michelle Bowman.