Malasia. Camboya y Tailandia firmaron este domingo una ampliación de un alto el fuego que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ayudó a negociar este verano para poner fin a su conflicto fronterizo.
Trump utilizó la amenaza de aranceles más altos contra ambos países para ayudar a que acordaran poner fin a los enfrentamientos que resultaron en decenas de muertes y el desplazamiento de cientos de miles de personas.
El mandatario estadunidense observó mientras el primer ministro camboyano, Hun Manet, y el primer ministro tailandés, Anutin Charnvirakul, firmaban el alto el fuego ampliado en la cumbre anual de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático, de la cual ambos países son miembros.
El acuerdo incluía la liberación por parte de Tailandia de 18 soldados camboyanos prisioneros y que ambas partes comenzaran a retirar armas pesadas de la zona fronteriza.
El territorio a lo largo de la frontera de 800 kilómetros entre Tailandia y Camboya ha sido disputado durante décadas, pero confrontaciones previas fueron limitadas y breves.