Entre sangre, drama y polémica, el mexicano Emanuel Vaquero Navarrete retuvo el cetro mundial de peso superpluma de la Organización Mundial de Boxeo. Con una aparatosa herida en la ceja, el tricolor se impuso por decisión unánime ante el filipino Charly Suárez, quien llegaba invicto, en una batalla que fue detenida al inicio del octavo episodio.
Si bien Navarrete había dominado el encuentro en Pechanga Arena, San Diego, fue en el sexto asalto cuando recibió un cabezazo accidental por parte de Charly Suárez que le provocó un corte profundo arriba de la ceja izquierda.
Aún cuando Vaquero Navarrete continuó en la batalla, se le notó incómodo debido a la sangre que comenzaba a cubrir su rostro y nublaba su visión. Fue entonces cuando el médico intervino y detuvo la contienda en el octavo asalto para preservar la seguridad del boxeador al tiempo que el duelo se definió por las tarjetas de los jueces.
“El espíritu de guerrero mexicano que llevamos dentro salió ahora. Desde que sentí el impacto sabía que era una cabezazo, después vi que me partió la ceja. Pero me sentí bien, fuerte”, dijo Navarrete, quien se quedó con una marca de 40 victorias, dos derrotas y un empate. Charly Suárez, a su vez, sufrió su primer descalabro después de 19 batallas.