Bruselas. Los ministros de Energía de la Unión Europea descartaron límites a los precios del gas ruso y pidieron a la Comisión Europea prepare medidas de emergencia, como limitar el precio del gas en el mercado comunitario –que no esté específicamente dirigido a Rusia– y establecer un objetivo de reducción de consumo de electricidad.
También contemplan ayudas fiscales y financieras para proteger a los hogares y a las empresas de la subida de los precios de la energía, coordinando sus políticas de apoyo financiero con el Banco Central Europeo (BCE) para evitar aumentar las presiones inflacionarias.
Ello como parte de las cuatro propuestas legislativas que acordaron los ministros durante una reunión extraordinaria realizada el viernes para enfrentar la crisis energética que atraviesa la comunidad europea y cuya propuesta presentará la próxima semana la Comisión Europea para atajar el alza de los precios de la energía en la Unión Europea (UE).
Los ministros de Energía de la Unión Europea convinieron que la Comisión Europea proponga medidas de reducción de consumo de electricidad en las horas de máximo consumo, según el resumen de la reunión.
La propuesta de limitar los precios del gas ruso, el mayor proveedor de Europa, no obtuvo un amplio apoyo entre los países de la UE, como planteaba la presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula Von der Leyen, como una medida para contrarrestar lo que considera la “manipulación” de las entregas de gas a Europa por parte de Rusia, a raíz de las tensiones entre Moscú y Bruselas tras la invasión rusa a Ucrania y las respectivas sanciones de Occidente.
El presidente ruso, Vladimir Putin, dijo esta semana que Moscú cortará todo el suministro a Europa si se aplica un tope de precios al gas ruso.
El plan también prevé que los gobiernos retiren el exceso de ingresos de los productores de energía no relacionados con el gas, que actualmente pueden vender su energía a precios elevados determinados por el precio del gas, y utilicen el dinero para reducir las facturas de los consumidores. Las empresas de combustibles fósiles también tendrían que pagar una “contribución solidaria”.
Por otro lado, Alemania prometió un rápido apoyo financiero a la empresa VNG, el tercer proveedor de gas del país, en dificultades debido a la situación del mercado energético, declaró el ministro de Economía, Robert Habeck.
En tanto, la empresa de gas ucraniana, Naftogaz, denunció a Gazprom para reclamarle que abone el dinero que Ucrania ha perdido por la drástica reducción del suministro de gas desde el inicio de la ofensiva militar en febrero.