A pesar de que actos de agresión o discriminación contra el personal de salud se han presentado en diversas partes del mundo ante el impacto por el Covid-19, en México los casos se han multiplicado debido a que “tenemos un enorme caldo de cultivo como reacción del miedo a lo desconocido, como la incertidumbre, la desconfianza a la ciencia y factores de estigmatización y discriminación.El duelo por estar aislado y perder una forma de vida, también genera ira”, alertó José Nicolás Martínez, investigador del Instituto Nacional de Psiquiatría “Ramón de la Fuente Muñiz” (INPRF).
Al participar en la mesa redonda “Covid-19, implicaciones en salud mental y derecho del personal de salud”, convocado por El Colegio Nacional, exhortó al gobierno federal a fortalecer las campañas de información y solidaridad con el personal de salud para frenar la “epidemia de miedo”, y recomendó “no recurrir instancias del derecho penal, sino apelar a la empatía de todos los seres humanos y comprender que esta situación va a terminar”.
Por su parte, María Elena Medina Mora, ex directora del INPRF e integrante del Colegio Nacional, destacó que ante un padecimiento hasta hace poco desconocido, y para el que, hasta ahora, no hay cura, puede generar ansiedad, fatiga por compasión, trauma y temor a contagiar a la familia, entre el personal de salud, por lo que consideró que las acciones de mitigación de la pandemia, también considerar la salud mental y emocional de todo el personal que labora en los hospitales y en áreas de alto riesgo.
Martínez, siquiatra forense, también demandó que no se asocie a los agresores con personas afectadas por trastornos mentales, ya que eso fomenta el estigma de estos padecimiento. Aseguró que quienes agreden “están en pleno uso de sus facultades mentales. Se dirigen directamente a un objeto que es identificable y que les genera miedo. Esto se puede combatir con información y campañas”, que acaben con las fake news y los rumores.