Villeta. Una amenaza de muerte lanzada vía redes sociales contra un activista ambiental de apenas 11 años indignó en Colombia, donde son comunes los ataques contra líderes de la sociedad civil y las amenazas se toman en serio.

Las autoridades colombianas dicen que investigan la amenaza contra Francisco Vera. El presidente Iván Duque, en un mensaje televisado en días recientes, prometió que serán encontrados los bandidos detrás un mensaje en Twitter.

El niño dice que seguirá con sus campañas en defensa del medio ambiente y llamó a los jóvenes del país a usar las redes sociales para generar un cambio social por la causa que amen.

Vera, a quien algunos comparan con la joven activista sueca Greta Thunberg, se reunió con seis compañeros de escuela hace unos dos años y marcharon a un parque en su ciudad de Villeta portando carteles y gritando lemas en defensa del medio ambiente, bajo la protección de su abuela.

Su grupo Guardianes de la Vida cuenta con más de 200 miembros. El año pasado sembró cientos de árboles y entregó una petición al gobierno para que prohíba el uso de plásticos no reciclables. El año pasado el menor habló ante el Congreso.

El 15 de enero Vera recibió un lúgubre mensaje en Twitter lleno de groserías y firmado con un nombre falso, en respuesta a un video en el cual el menor pidió a Duque mejorar el acceso a Internet a los alumnos obligados a estudiar en la casa debido a la pandemia.

Tales amenazas tienen peso en Colombia. La Organización de Naciones Unidas (ONU) estima que unos 53 líderes comunitarios fueron asesinados el año pasado en el país sudamericano, e investiga denuncias de otros 80 crímenes. Colombia está en un delicado proceso de restaurar la paz tras décadas de lucha guerrillera y batallas entre cárteles del narcotráfico y grupos paramilitares.

Twitter suspendió la cuenta desde donde provino la amenaza y el niño ha recibido cientos de mensajes de apoyo, incluso una carta firmada por la alta comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, que fue entregada personalmente por representantes de la ONU.

En su casa en Villeta, un poblado rodeado de montañas, Vera insiste en que su grupo seguirá haciendo campaña contra la fracturación hidráulica y a favor de que queden prohibidos los plásticos no reciclables, iniciativa que fue objeto de una petición el año pasado con 24mil firmas.

Ana María Manzanares, madre del menor, espera que la amenaza no haya sido más que una broma de mal gusto.

Si bien el niño dice disfrutar de ver debates políticos en televisión, también tiene pasatiempos más comunes para gente de su edad como los videojuegos, caminar con su perro Pinky y nadar en la piscina local.