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Édgar Rivera cierra temporada con un salto de 2.25 metros en Alemania
 
Periódico La Jornada
Martes 1º de septiembre de 2020, p. a12

En el transcurso de dos semanas, el saltador Édgar Rivera, quien vive en Alemania, cerró la temporada con tres competencias, una en Italia y dos en tierras germanas, y marcas que lo dejan satisfecho aun cuando estuvo sin actividad durante seis meses por la pandemia del Covid-19.

El pasado sábado, el sonorense hizo su mejor marca de la campaña al aire libre con 2.25 metros en Sportsplatz Fleisbach, Sinn, Alemania, luego de que días anteriores registró 2.17 en la reunión de Kraichgaustadion, Eppingen, y 2.20 en Campo Conti Ancona, de Italia. Los certámenes fueron sin público debido a los rebrotes del coronavirus.

Los resultados ubican al saltador de altura entre los 35 mejores del mundo, el parámetro para estar en el rango clasificatorio por puntos a los Juegos Olímpicos de Tokio que se realizarán en 2021, pero si cumple con la marca de 2.33 tendrá el pasaje directo.

Desde la ciudad de Colonia, donde radica desde hace un lustro para entrenar en el Centro de Alto Rendimiento de especialistas en salto de la World Athletics, Rivera está emocionado y motivado por los planes del siguiente año.

“Mi cuerpo extrañaba bastante el dolor, cansancio, entrenamiento, la tortura, creo que soy masoquista, pero necesitaba la rutina, el sentirme en forma, porque aunque practicaba no tenía coordinación.

Me dolía la pantorrilla al correr tan fuerte, como cuando sientes que te va a dar un calambre o un tirón. La verdad sí me daba pendiente de que no estuviera listo y tenía miedo, porque si no era capaz, me lastimo, explica Rivera.

El mexicano regresó a Europa a finales de junio, luego de pasar unos meses de confinamiento con su familia en Agua Prieta. “Fueron 30 días de entrenamiento para estar listo en estas tres competencias. No tenía expectativas y salté 2.25.

Mi entrenador (Wolfgang Ritzdorf) está feliz de que pudimos competir y por los resultados, porque eso nos da una base para comenzar la preparación general en octubre y en enero la temporada bajo techo, señala el atleta de 29 años y cuarto lugar mundial en Londres 2017 con 2.29, su mejor marca.