La Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA) consideró que el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec es un componente para el despojo y no está pensado para el mejoramiento de su población, sino para fortalecer la extracción de bienes naturales.

Consideró que si no se le detiene, continuará siendo la misma retórica de la ya conocida política neoliberal que hoy desde el gobierno se dice ha terminado, pero la cual, en los hechos, con el proyecto muestra que estamos lejos de ello.

En un comunicado, señaló que el decreto, por el cual se creó el organismo público descentralizado Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, da vida a todo el engranaje público y privado para la extracción, comercialización y distribución de los bienes naturales y comunes del territorio nacional hacia los mercados asiáticos y de otros continentes.

En sí mismo, manifestó, significa la activación de toda la maquinaria legal, pero también la simulada y de coacción, como sucede por ejemplo con el tema de las consultas (a los pueblos indígenas en la región), en donde sin duda alguna persiste, como antaño, una estrecha relación de contubernio entre el Estado y el poder de las empresas y sus dueños, que insisten en la comercialización global.