En la actual administración se prevé aumentar la producción en zonas áridas hasta en 60 por ciento. Una medida inmediata será con la siembra masiva de árboles frutales y maderables en zonas de la mixteca de Puebla, Oaxaca y Guerrero.

Ramón Sandoval Noriega, director general de la Comisión Nacional de las Zonas Áridas, de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), sostuvo que sectores productivos de la iniciativa privada han manifestado su interés por participar en acciones y programas gubernamentales con recursos económicos, técnicos y humanos en el desarrollo de dichas áreas.

En las zonas áridas y semidesérticas del país el gobierno incentivará inversiones, la producción y el valor agregado para ofrecer a los productores de esas regiones –con énfasis en quienes se encuentran en pobreza– oportunidades de desarrollo, crecimiento sustentable e ingresos seguros, afirmó el titular de la Sader, Víctor Villalobos.

Agregó que periódicamente se supervisará el desempeño y avances de los programas de la Comisión, así como sus resultados e impactos directos en los productores. La desertificación es un proceso de degradación y destrucción de la cubierta vegetal, principalmente por uso inadecuado del suelo, deforestación y erosión, por lo que no es una condición exclusiva de las zonas áridas.