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Niega el Papa haber pedido hablar con sindicalistas y empresarios

Intelectuales argentinos llaman a defender la estabilidad del gobierno
Corresponsal
Periódico La Jornada
Lunes 10 de febrero de 2014, p. 26

Buenos Aires 9 de enero.

La patria en peligro, fue el titular del espacio de Carta Abierta conformado por reconocidos intelectuales, en un escenario complejo donde el gobierno a pesar de una campaña interna y externa en su contra está logrado frenar en las últimas horas la corrida cambiaria y estabilizar el dólar en el precio oficial de ocho pesos dispuesto hace dos semanas.

En un documento el colectivo Carta Abierta señala que debemos sentirnos a las puertas de una nueva movilización y avanzar en mecanismos que establezcan el manejo estatal del comercio exterior, al instar a defender los precios. También mencionan recurrir a la imaginación de tantos momentos históricos para nuevas y creativas formas movilizatorias.

Al coincidir con expresiones similares, llaman al kirchnerismo -como se denomina popularmente al gobernante Frente para la Victoria- a movilizarse y salir a las calles.

El escritor Horacio González, director de la Biblioteca Nacional, al leer el documento de Carta Abierta sostuvo que este proceso transformador, conducido por Néstor y Cristina Kirchner, ha sido una recreación de las militancias y el fervor público nacional, ancladas en una larga memoria popular que no tiene propietarios.

Fue la primera Asamblea de este año, en la que los intelectuales y artistas acusaron a un puñado de grandes empresas (Cargill, Noble Argentina, Bunge Argentina, Dreyfus, Molinos Río de la Plata, Vicentin, Aceitera General Deheza, Nidera y Toepfer) que exportan más de 90 por ciento del grano, aceite y harina de soya argentinos, histórica base de la riqueza y la producción del país de organizar un cepo financiero sobre el gobierno.

Esto obligó a tomar medidas difíciles y comprometedoras para el futuro del país, como la devaluación no querida por el gobierno ni conveniente para las mayorías populares lo que consideraron grave. No es un simple episodio más de la historia económica nacional. Las grandes organizaciones agropecuarias tienen todas fuertes vínculos internacionales, financieros, comunicacionales y siempre están dotadas para producir el espejismo de que sus intereses coinciden con los de una gran parte de las desconcertadas clases medias argentinas, señala el documento.

En estos momentos que caracterizan como dramáticos se hace necesario reponer nuestras fuerzas y dignidad para la lucha, pues esto exigirá grandes esfuerzos para que la devaluación no recaiga en los amplios estratos de las clases populares, históricamente las más perjudicadas con este tipo de medidas.

En la situación actual en base a diversos análisis y testimonios que se debatieron y llamaron a avanzar en mecanismos que establezcan el manejo estatal del comercio exterior, y en otra serie de importantes medidas.

Nuestro país ha visto cíclicamente amenazados, boicoteados y truncados proyectos de desarrollo nacional autónomo por la restricción externa, es decir, por la insuficiencia de divisas. Éstas son el recurso clave para la continuidad y profundización de dinámicas progresivas. Por lo tanto, resulta indispensable sustraer la disposición sobre las mismas del chantaje monopólico y garantizar su control gubernamental, afirmaron.

También mencionan la necesidad de generar un movimiento de opinión y la movilización social (como ocurrió con la ley de medios audiovisuales) que acompañe la consecución de ese objetivo auténticamente democrático.

Más adelante sostienen que la soberanía en la disposición de las divisas requerirá avanzar en otras áreas para reforzar o establecer el control estatal y social (por ejemplo, a los puertos privados), mayores regulaciones al capital especulativo y al sistema financiero, especialmente a la banca de propiedad extranjera, entre tantas .

Alertan asimismo sobre el peligro de los intentos de restaurar el viejo país oligárquico que está pronto a mostrar sus dientes de hierro, lo que serían sus herramientas de ajuste.

Por otra parte y dentro de la guerra mediática opositora que se incrementa en estos días el papa Francisco desmintió que hubiera pedido una reunión con funcionarios del gobierno, sindicalistas y empresarios en el Vaticano, como publicaron en portada el conservador diario La Nación, y la revista ultraderechista Perfil.

De esta manera, cruzó fuerte a estas publicaciones que informaban este domingo sobre ese encuentro el próximo 19 de marzo.

Nada había en su agenda sobre una reunión con los representantes argentinos ante la Organización Internacional de Trabajo (OIT),dijo una periodista amiga, Alicia Barrios, con quien Jorge Mario Bergoglio se comunicó este mediodía. Los medios opositores habían informado que el Papa también había pedido a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner que se reuniera con Antonio Caló, dirigente de la Confederación General del Trabajo (CGT oficialista), lo que este negó terminantemente.