Número 181
Jueves 4 de Agosto
de 2011

Director fundador
CARLOS PAYAN VELVER

Directora general
CARMEN LIRA SAADE

Director:
Alejandro Brito Lemus

Como ya es costumbre y tradición en los congresos sobre sida, las organizaciones de la sociedad civil aprovechan el foro y la presencia del secretario de Salud en turno, del gobernador anfitrión y de los numerosos medios que acuden a cubrir el evento para externar sus reclamos, demandar atención sobre algún problema específico o difundir sus mensajes. Y como respuesta esperada, los funcionarios interpelados responden que atenderán los reclamos, no todos dirigidos en contra de ellos, de las organizaciones sociales.
El más reciente de ese tipo de congresos, realizado en Villahermosa, Tabasco, el pasado mes de julio, no fue la excepción. Algunas organizaciones extendieron sus mantas, sacaron sus pancartas y gritaron consignas durante la inauguración del evento. Sin embargo, en esta ocasión las autoridades del Censida sobrerreaccionaron a las protestas y en respuesta lanzaron acusaciones temerarias contra las organizaciones civiles y comunitarias.
Es necesario entender que es precisamente esa relación dialéctica de acción-reacción, establecida en los hechos entre autoridades de Salud y sociedad civil, la base sobre la cual se ha construido la respuesta a la epidemia del VIH: la que ha permitido establecer las prioridades de atención, la que ha enderezado el rumbo de la política pública, la que ha logrado conseguir los recursos. Relación dialéctica que muchas veces se ha resuelto en el consenso. Pero para que la síntesis de esa relación dialéctica se logre es necesario no renunciar al diálogo.

S U B I R