Brasilia, 11 de diciembre. El presidente hondureño, Manuel Zelaya, declaró que permanecerá refugiado en la embajada brasileña en Tegucigalpa como máximo hasta el 27 de enero, fecha en que finalizará su mandato constitucional, tras haber fracasado el miércoles pasado en su intención de obtener un salvoconducto del régimen de facto para partir rumbo a México.

Seguro hasta el 27 de enero de 2010, cuando terminará mi mandato. Sin embargo, mi posición es salir lo más pronto posible, lógicamente con el respaldo del gobierno de Brasil, señaló en una entrevista telefónica con el canal de televisión Globo.

En Santo Domingo, el presidente dominicano, Leonel Fernández, anunció que este domingo recibirá en su país a Zelaya y el lunes llegará el mandatario electo hondureño Porfirio Lobo, con quienes se reunirá. Luego ambos visitantes se entrevistarán para contribuir a la superación de la crisis.

Leonel Fernández confió en que el régimen de facto permitirá esta vez la salida de Zelaya sin imponer condiciones y evitará que fracase esta nueva iniciativa de diálogo, después de que esos encuentros se iban a efectuar el jueves pero se frustraron ante la negativa del gobierno de Roberto Micheletti de permitir la salida del gobernante constitucional.

En tanto, la cancillería brasileña desmintió que haya otorgado como plazo hasta el 27 de enero próximo para que el presidente Zelaya abandone la embajada brasileña en la capital hondureña. El canciller Celso Amorim siempre dijo que Zelaya puede quedarse el tiempo que sea necesario, aclaró hoy en Brasilia un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores.

El funcionario atribuyó a un error de interpretación las declaraciones formuladas a la televisión brasileña por el encargado de negocios de su embajada en Tegucigalpa, Francisco Catunda, quien indicó: el presidente Zelaya tiene plena conciencia de que el 27 de enero asumirá un nuevo gobierno y que, al terminarse su mandato, deberá seguir otro rumbo.

La fuente de la cancillería brasileña subrayó que pese a que está claro que el mandato de Zelaya terminará el 27 de enero, ello no significa que tenga automáticamente que salir de la embajada, donde permanece desde el 21 de septiembre tras su llegada subrepticia.

El régimen de facto hondureño pidió a Brasil que defina el estatus jurídico que tiene Zelaya dentro de la embajada, reiterando una viaja demanda. Hasta ahora se ha hablado sólo de que Zelaya se encuentra en la legación en calidad de huésped distinguido.

La negativa del régimen de Micheletti a permitir la salida de Zelaya a México fue porque se negó a firmar su renuncia al mandato presidencial y a viajar como asilado político.

Mientras, se conoció que 58 por ciento de hondureños rechaza el golpe de Estado de los militares y de la derecha del país centroamericano, que a finales de junio expulsó de Honduras a Zelaya, y 28 por ciento lo respalda. El sondeo de Latinobarómetro, difundido el viernes en Chile, revela además que 24 por ciento de latinoamericanos aprueban el golpe.

El secretario general de la Organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza, estimó que los golpistas buscan mantener la crisis política para condicionar al presidente electo Porfirio Lobo, al referirse a las trabas impuestas para que Zelaya y su familia salieran cuando ya se había aceptado el envío de un avión mexicano y de pronto presentaron otras condiciones.