El boxeo de México vive un sueño actualmente por la numerosa programación de funciones, así como por su amplia transmisión televisiva, consideró Mauricio Sulaimán, secretario del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).

Explicó que éste podría ser el arranque en la consolidación de esta actividad, ya que hacía mucho tiempo que no se programaban tantas peleas en el país, ni que las televisoras se ocuparan de transmitirlas, lo cual habla del interés del público en seguir a sus ídolos.

En sustitución de su padre y dirigente del CMB, José Sulaimán, quien están en Corea del Sur, Mauricio indicó que en Estados Unidos hay una tendencia apoyada por las televisoras más importantes de esa nación y un par de promotores que montan funciones de combates por nada, ya que no se disputa ningún campeonato.

Consideró que las ganancias son muy jugosas para los representantes y obviamente para los púgiles de renombre que participan en ellas, aunque se acaba con el boxeo, porque siempre los combatientes buscan ganar un título, algo que les brinde reconocimiento en el ámbito mundial.

En su opinión, contiendas como la Manny Pacquiao ante el inglés Ricky Hatton y el mismo Óscar de la Hoya contra el filipino, son ejemplos de peleas que se hacen sin un título serio de por medio, aunque dejan excelentes dividendos a sus protagonistas quienes pierden su buen nombre en caso de ser derrotados.

Sobre el pugilismo nacional, destacó que Jhonny González no la tendrá fácil en su intento de despojar al japonés Toshiaki Nishioka del cetro supergallo, este fin de semana en Monterrey.