La Habana., En una carta dirigida al presidente estadunidense, Joe Biden, publicada ayer, cientos de empresarios cubanos pidieron el levantamiento de las sanciones económicas contra la isla, que perjudican de manera significativa sus actividades y a sus familias.

A través de nuestros negocios, estamos trabajando con el fin de construir un bienestar económico para nuestras familias, de manera que los cubanos emprendedores no sientan la necesidad de emigrar para tener un trabajo gratificante y prosperidad económica, explican en la carta 247 directivos de empresas privadas y cooperativas.

Sin embargo, la política actual de Estados Unidos hacia Cuba afecta en gran medida nuestras operaciones comerciales diarias y frena nuestra capacidad de prosperar, agregaron, al lamentar que Biden mantenga, pese a sus promesas de campaña, las 243 sanciones impuestas por su predecesor Donald Trump, que han reforzado el bloqueo vigente desde 1962.

Durante su campaña, Biden señaló la necesidad de una nueva política hacia Cuba, que incluyera el levantamiento de las restricciones a los viajes de turistas a la isla, y de las transferencias de remesas. Pero hasta ahora no han modificado ninguna de estas medidas.

Le instamos a tomar las siguientes acciones inmediatas: 1) restablecer un camino para las remesas; 2) abrir los viajes para aquellos sujetos a la jurisdicción de Estados Unidos; 3) reabrir la embajada estadunidense en La Habana, y 4) sacar a Cuba de su lista de países patrocinadores del terrorismo, se afirma en la misiva.

El sector privado cubano vivió un efímero repunte durante el acercamiento de Estados Unidos y Cuba, entre 2014 y 2016, en la administración de Barack Obama.

Soñamos con el regreso a aquellos días, cuando el acercamiento era la política oficial de Estados Unidos, produciendo un auge económico que nos benefició a todos, dicen los empresarios en su carta.

Aunque la economía cubana sigue siendo estatal en 85 por ciento, hay más de 600 mil trabajadores privados que recién fueron autorizados para crear pequeñas y medianas empresas.

Sin embargo, la pandemia del Covid-19 obligó a más de 250 mil trabajadores privados a suspender actividades.