Tokio. Las autoridades japonesas ampliaron el estado de emergencia ya en vigor por la pandemia de coronavirus en seis departamentos del país a otras tres regiones, debido a un aumento de los contagios, cuando faltan 10 semanas para el inicio de los Juegos Olímpicos de Tokio.

Hemos decidido añadir los departamentos de Hokkaido, Okayama e Hiroshima a los que ya están en estado de emergencia hasta el 31 de mayo, dijo el primer ministro Yoshihide Suga.

En esos tres departamentos, la población es relativamente importante y el número de casos aumenta rápidamente, agregó.

Además, se extenderá otro abanico de medidas –de un nivel inferior al estado de emergencia– a dos prefecturas más, con lo que estas regirán en 10 departamentos en total, de los 47 que tiene el país.

Ayer, las autoridades de Tokio recibieron una petición en la que se reclama la anulación de la justa, que recabó más de 350 mil firmas.

El documento de la campaña llamada Detener las Olimpiadas de Tokio fue redactado por el abogado Kenji Utsunomiya, ex candidato a gobernador de la capital japonesa.

Esta vez, la cuestión es saber a qué damos prioridad, a la vida o a una ceremonia y un acto llamado Juegos Olímpicos, afirmó Utsunomiya, quien pidió a la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, instar al Comité Olímpico Internacional a la anulación de los juegos.

Creo que la cobertura de la prensa pone mucha presión sobre el COI, el Comité Paralímpico Internacional, el gobierno japonés, el metropolitano de Tokio y el comité organizador, indicó Utsunomiya en conferencia de prensa. En ese sentido, me alegro de haberlo hecho, pero en cuanto a las cifras, creo que se necesitan realmente decenas de millones de firmas.

El presidente del Comité Internacional Paralímpico (CIP), Andrew Parsons, señaló que comprende la cólera en la población japonesa, pero calificó de ínfimos los riesgos de propagación del virus por parte de los deportistas.

Por su parte, el dirigente de World Athletics, Sebastian Coe, confía en que la justa se realizará según lo planeado, ya que las vacunas brindan a los atletas un mayor acceso a los entrenamientos y las competencias de preparación.

Puedo entender el miedo, pero eso sólo nos refuerza la necesidad de asegurarnos de que la gente entienda que el deporte realmente es bueno en este momento, dijo Coe.