Por la contingencia que ha provocado el Covid-19, los afiliados a la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA) siguen estrictas medidas sanitarias, señaló José Suárez Valdez, secretario de prensa de la agrupación.

En entrevista con La Jornada, el capitán Suárez Valdez explicó que antes de cada vuelo se desinfectan las cabinas, tanto la de pilotos como la de pasajeros, y añadió que también en el uso del uniforme se han hecho variaciones.

No usamos corbata, la gorra tampoco, ni saco, porque son prendas que no se lavan con frecuencia, como la camisa.

Explicó que los pilotos que llegan a zonas donde hay más contagios, sobre todo en destinos en el extranjero, son revisados constantemente por el servicio médico a fin de que estén en condiciones óptimas, para asegurarnos de que estén en buen estado de salud, para que los pasajeros estén en manos de un profesional en perfecto estado de salud.

Además, cuando están en pernocta no salen del hotel, se opta ahora por hoteles que estén cerca de los aeropuertos para reducir los tiempos de traslado y con transportaciones exclusivas para pilotos, con la finalidad de que no haya contacto con otras personas.

También se les están dando mascarillas y tienen permiso para usarlas en su estancia en aeropuertos, en las transportaciones y durante sus pernoctas.

Aclaró que dentro de un avión no se corre un mayor riesgo. Muchos piensan que el avión es un sistema cerrado, que vamos todos ahí respirando lo mismo. La realidad es que los aviones siempre están recibiendo aire del exterior. El aire está recirculando, pero se filtra y estos filtros son parecidos a los de los quirófanos, son filtros que absorben partículas, bacterias y virus, se llaman filtros Hepa. Si alguien tose sin precaución, no se va a todo el avión. Se va filtrando, se absorbe a nivel del piso y sale nuevo aire a nivel del techo.

Además, a los pilotos (los afiliados a la ASPA son pilotos de Aeroméxico, Aeroméxico Connect y Aeromar) les damos kit con alcohol en gel.

La ASPA destacó que los más de mil 900 pilotos que aglutina continúan trabajando, pese a que los vuelos comerciales se han reducido en más de 60 por ciento. Algunos de ellos realizando vuelos comerciales de pasajeros y otros operando, por primera vez, como pilotos de carga en los diversos vuelos chárter que se tienen programados.

Tal fue el caso del vuelo México-Fráncfort de Aeroméxico que hace unos días transportó equipo médico. Al respecto, el capitán Héctor Aguiñiga, primer oficial del vuelo, comentó: En un entorno como el que estamos viviendo, nuestra profesión como pilotos se vuelve sustancial porque tenemos la responsabilidad de contribuir para que el mundo siga conectado; aunque los vuelos de pasajeros se han reducido significativamente, hay mucho que hacer. En este caso, transportar material que es muy importante para atender la pandemia.