Política
Ver día anteriorDomingo 9 de febrero de 2020Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
Indígenas, prioridad en la transformación

López Obrador visita poblados de Edomex y Querétaro // Defiende a Alfredo del Mazo

Foto
▲ En Atlacomulco, Edomex, el presidente Andrés Manuel López Obrador presidió el diálogo con los pueblos mazahua, otomí e indígenas migrantes .Foto cortesía de la Presidencia
 
Periódico La Jornada
Domingo 9 de febrero de 2020, p. 3

Los protagonistas de la transformación nacional son los pueblos y comunidades indígenas, resaltó el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien les pidió responder a las actitudes discriminatorias con una frase: Nada más díganle (al ofensor) que el mejor presidente que ha habido en la historia de México fue un indígena zapoteco: Benito Juárez.

En el periplo del fin de semana por la región otomí y mazahua de los estados de Guanajuato, Querétaro y de México, López Obrador recaló este sábado en Amealco de Bonfil y en el enclave del poder político priísta, Atlacomulco.

Reiteró que su gobierno no contempla ni aumentar, ni aplicar impuestos, qué hay suficiente dinero porque ya no se va por el caño de la corrupción.

En Amealco, Querétaro, más de dos mil personas se congregaron en un terreno arcilloso. La mayoría acudió en familia o en pequeños grupos. En Atlacomulco, se sintió el músculo de la tradición priísta acostumbrada a las enormes movilizaciones, debajo de la carpa de las proporciones de una cancha de futbol. El músculo, tan reprochado por un sector de la Cuarta Transformación, se dejó ver otra vez acompasado de las incansables banda y tambora.

Los casi cinco mil indígenas mazahuas y otomíes se dividieron en torno al gobernador priísta, Alfredo del Mazo. El abucheo en su contra –por momentos ensordecedor– enrojeció al priísta, le incomodó de tal manera que encontró una salida a la irreverencia del pueblo: aplaudía cada intervención del Presidente y no le quitaba la vista.

En su tierra, gobernada por su abuelo, su padre y ahora por él, Del Mazo enfrentó el repudio, y así lo sintió cuando intervino en el encuentro multitudinario. Fue el jefe del Ejecutivo federal quien salió en su defensa: mi pecho no es bodega, y, no va a gustar a algunos, pero el gobernador Del Mazo ha cumplido al 100, al 100. Y otra vez la habilidad de López Obrador se manifestó cuando confrontó a los inconformes con el mexiquense y los convenció de la conveniencia de no pelear, y mejor trabajar en equipo.

Al mediodía estuvo en Amealco, sitio al que no acudió el gobernador Francisco Domínguez por encontrarse de gira en Londres. Quizá le resultó propicia la ausencia porque entre los indígenas el reproche estaba latente. Ahí, el representante comunitario Ángel Sánchez demandó apoyo para la cultura y la preservación de sus tradiciones, pero también para tener mayor acceso a los servicios de atención a la salud, al trabajo, mejor infraestructura, acceso suficiente al agua y a combatir la contaminación industrial, así como respeto a la forma comunitaria de gobierno.

También demandamos la creación de una universidad intercultural para el pueblo otomí, con carreras que beneficien a nuestras comunidades. A la par, solicitamos acceso sin discriminación a las normales y escuelas de nivel superior, expresó.

El presidente expuso que su gira por los pueblos originarios de México la emprendió para informarles que se está llevando a cabo una transformación y que ustedes son los principales protagonistas.

Refirió que acude a supervisar que los programas sociales se apliquen sin menoscabo –y lo hará habitualmente–, porque está a punto de alcanzarse la entrega total de los apoyos –por lo menos uno– en todos los hogares indígenas. Porque así como está pendiente de la seguridad, también del bienestar social.

Aludió a la importancia del pasado y el bagaje histórico de las comunidades originarias: “una cosa que es muy importante: no avergonzarnos de nuestro origen. Quien no sabe de dónde viene, nunca va a saber hacia dónde va. Es un orgullo ser de una comunidad indígena, pertenecer a una cultura prehispánica, tener tradiciones, costumbres, lengua y organización social.

Entonces anunció que su gobierno no está a favor de aplicar ni aumentar los impuestos. Ahora ya no hay aumento de impuestos ni impuestos nuevos. Antes había gasolinazos, ¿o ya se les olvidó? Ahora estamos construyendo una nueva refinería para dejar de comprar la gasolina en el extranjero y cuando tengamos autosuficiencia en combustibles, entonces sí vamos a bajar el precio de los hidrocarburos.

Adujo que no permite la corrupción, que ha acabado con los lujos en el gobierno. Y mostró su pañuelo blanco, lo agitó con el beneplácito de la concurrencia. Ya no hay corrupción arriba y se tiene que ir limpiando de arriba para abajo, como se barren las escaleras, dando el ejemplo arriba.