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Se negocia con Washington: Degenhart

Guatemala no ha aceptado convertirse en tercer país seguro

La prioridad es aplicar medidas para frenar el flujo humano

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▲ Pese a la presencia de la Guardia Nacional, centroamericanos siguen cruzando el río Suchiate con propósitos comerciales o para trasladar personas.Foto Alfredo Domínguez
 
Periódico La Jornada
Miércoles 19 de junio de 2019, p. 10

Ciudad de Guatemala. Guatemala no ha aceptado convertirse en un tercer país seguro para los migrantes que buscan asilo como lo sugirió el presidente estadunidense Donald Trump, pero el país centroamericano dijo que está negociando medidas con Estados Unidos para frenar el flujo migratorio en la región.

El ministro de Gobernación, Enrique Degenhart, dijo a periodistas que se adelanta la firma de un convenio con Estados Unidos que permitirá generar la plataforma legal para poder operar contra las estructuras de tráfico de personas. Sin embargo, negó que Guatemala haya aceptado ser un tercer país receptor de migrantes que esperarían en su territorio a que Estados Unidos resuelva sus peticiones de asilo o entrada a ese país.

No hemos dicho que aceptamos ser un tercer país, estamos en la discusión para encontrar una medida que sea favorable para ambas naciones, dijo el funcionario a la entrada de una reunión de gabinete.

El lunes Trump dijo en su cuenta de Twitter que Guatemala se está preparando para firmar un acuerdo de tercer país seguro. Estados Unidos está buscando un acuerdo similar con México.

Un acuerdo de ese tipo significaría que Guatemala sería un país receptor para miles de migrantes de Honduras y El Salvador. Los críticos han señalado que Guatemala sufre la violencia y pobreza que también golpea a esas naciones vecinas. El ministro dijo que esta semana viajará a Estados Unidos para conocer la tecnología de uso de ADN en pruebas rápidas, a fin de asegurarnos que los menores de edad no sean robados, secuestrados o alquilados en una ruta tan peligrosa como la migratoria.

Degenhart subrayó que se tiene una alianza con EU y que lo que se busca es viabilizar el combate directo a las estructuras criminales del tráfico de personas. Sobre modificar el CA-4 –un acuerdo centroamericano de libre circulación de personas– el funcionario aseguró que no se ha hablado de ello y que un asunto como ese deberá discutirse con los demás países centroamericanos.

El CA-4 no fue diseñado para que fuera utilizado por caravanas, las estructuras criminales se aprovecha de ese tipo de acuerdos, que son buenos acuerdos, para hacer sus operaciones criminales, dijo. El ministro aseguró que han identificado a varias estructuras de traficantes a escala nacional.