Tras 10 años de haber iniciado su construcción y con al menos cinco años de retraso, se prevé que en julio comience a operar el Túnel Emisor Oriente (TEO), informó la titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Blanca Jiménez Cisneros.

Tras realizar un recorrido de supervisión de los trabajos realizados en la lumbrera 18 del túnel, en el que estuvo acompañada de la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, y el titular de la Comisión del Agua del estado de México, Alfredo Pérez Guzmán, la funcionaria señaló que hasta que se terminen los trabajos se dará a conocer el costo total de la obra.

Sin embargo, se estima que la inversión en la misma se duplicó; incluso, la titular del Ejecutivo capitalino declaró hace unos días que se prevé un costo de 30 mil millones de pesos, cuando originalmente se anunció que sería la mitad.

–¿Va a haber alguna auditoría ante el retraso de años y para determinar si hubo desvío de recursos? –se le pregunto a Jiménez Cisneros.

–En general, dentro de la Conagua estamos practicando una auditoría profunda a muchas obras que se están haciendo; ésta sería una más –respondió sin dar mayores detalles.

Traerá breneficios

Pese a esa demora y el incremento en su presupuesto, los funcionarios resaltaron los beneficios que traerá el túnel para evitar inundaciones en la zona oriente de la zona metropolitana del valle de México en la temporada de lluvias, lo cual, señalaron, beneficiará a 21 millones de personas.

Más allá de su revisión administrativa, es realmente una obra impresionante de la ingeniería nacional; muchas veces se mira a otros países, que a veces es necesario, pero los ingenieros mexicanos son de un gran nivel, expresó a su vez Sheinbaum Pardo.

La titular de la Conagua expresó que se trata de una obra única en el mundo, que con 62 kilómetros de longitud, se suma al Gran Canal del Desagüe y a los túneles emisores Poniente y Central, con lo que se incrementa la capacidad de desalojo de agua en 50 por ciento, de 320 a 470 metros cúbicos por segundo y con el flujo se puede llenar ocho veces el estadio Azteca en un solo día.

Aunque se preveía terminar los trabajos antes de la temporada de lluvias, la cual se inicia en mayo, se estima que empiece operaciones el 11 de julio, ya sea que atrasemos la temporada de lluvias o adelantemos la obra, dijo en tono de broma Blanca Jiménez.