Jerusalén

Fuerzas israelíes detuvieron este lunes a decenas de palestinos en Jerusalén este, tras el ataque del domingo pasado en el que un miliciano palestino, a bordo de un automóvil, mató a dos personas y dejó heridas a otras cinco, antes de ser baleado por agentes de la policía, informaron los servicios de emergencia israelíes

En total, 31 palestinos que querían participar en las celebraciones en memoria del autor del ataque, así como miembros de su familia, fueron detenidos en Jerusalén Este, declaró en la radio militar el ministro de la Seguridad Interior, Gilad Erdan.

Otros 15 palestinos fueron arrestados por arrojar bombas molotov contra las fuerzas de seguridad en varios barrios de Jerusalén este, sector palestino de la ciudad ocupada por Israel, informó un portavoz de la policía.

El atacante, un palestino de 39 años de nombre Misbá Abu Sbeih, abrió fuego en tres lugares distintos, y mató a Levana Melihi, una jubilada de 60 años, y a Yossef Kirma, un policía de 29 años. Medios israelíes informaron que el palestino, armado con un fusil M16 del ejército israelí, había cumplido múltiples condenas por actos violentos y que debía reportarse a la cárcel el domingo por haber agredido a un policía.

El atentado del domingo, puso en alerta a las autoridades ante una nueva escalada de violencia antes de las grandes celebraciones judías: Yom Kippur, a partir de este martes y la fiesta del Sucot, a principios de la semana próxima. El año pasado, este periodo estuvo marcado por fuertes tensiones, desde octubre de 2015, la ola de violencia que estalló en los Territorios Palestinos, Israel y Jerusalén ha costado la vida a 232 palestinos, 36 israelíes, dos estadounidenses, un eritreo y un sudanés, según la Afp.

´Por su parte el gobierno de Gaza, controlado por el grupo islamita Hamas, celebró el ataque y lo describió como una respuesta natural, en un comunicado del portavoz Fawzi Barhoum. Hamas se abstuvo de reivindicar el ataque, pero el agresor es identificado como uno de sus miembros, Abu Sbeih, un activista conocido como el León de Al Aqsa.