San Buenaventura, Coah.

Cientos de pobladores de San Buenaventura mantienen en su poder desde hace tres semanas el palacio municipal de esa localidad, ubicada en la zona centro de Coahuila, en protesta porque el alcalde priísta Óscar Flores Lugo incrementó a su antojo los impuestos municipales, sin respetar la ley de ingresos que autorizó el Congreso estatal.

Los manifestantes descubrieron que el sacerdote católico Christian Figueroa Martínez, quien en una misa condenó el movimiento de protesta, cobra cien pesos diarios en la nómina del DIF municipal a cambio de ofrecer conferencias motivacionales.

En el púlpito, Figueroa Martínez acusó a los manifestantes de recibir dinero para ocupar la alcaldía, en protesta porque Flores Lugo incrementó la tasa del impuesto predial hasta en 40 por ciento, por encima de la ley de ingresos que aprobó el Congreso del estado.

Sacerdote en nómina municipal

Figueroa Martínez es párroco de la iglesia Santo Patrono de San Buenaventura y forma parte de la plantilla de empleados de confianza del sistema para el Desarrollo Integral de la Familia en ese municipio que se localiza en la zona centro del estado, aseguró Norma Arredondo, una de las mujeres que lideran la manifestación.

El sacerdote se encuentra registrado con la serie EM01042 en la nómina municipal.

En agosto de 2011, Figueroa fue detenido por la Policía Federal cuando conducía un automóvil importado de manera ilegal, amparado con una matrícula de la Organización Nacional para la Protección del Patrimonio Familiar. El arresto ocurrió en la carretera Saltillo-Arteaga, cuando viajaba a este último municipio a oficiar una misa de matrimonio.