Lunes 21 de julio de 2014, p. 18
Sin saber si era culpable de los delitos de trata de personas y explotación infantil, “ya querían quemar en leña verde” a Rosa Verduzco, señaló el cardenal Norberto Rivera Carrera.
En la misa dominical, el arzobispo primado de México hizo una analogía de cuando “se siembra cizaña junto a la buena semilla. Queriendo cortarla podemos arrancar la planta buena”, como en el caso, dijo, de la directora del albergue La Gran Familia.
Por ello pidió a los feligreses tener paciencia “con aquella cizaña que vemos alrededor. No nos dediquemos a condenar, sino a ayudar a otras personas a convertirse en una buena planta”.