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Los comicios de octubre próximo serán los más competidos desde 1999: analistas

Arrancan en Venezuela campañas rumbo a elecciones presidenciales

Hugo Chávez encabeza una caravana y despeja así los rumores sobre su estado de salud

Henrique Capriles visita comunidades apartadas para resaltar el olvido del gobierno nacional

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Comenzó el huracán bolivariano, dijo el presidente venezolano (izquierda) en Maracay, donde realizó un acto proselitista. Henrique Capriles, en el poblado de Santa Elena de Uairán, estado de Bolívar, aseguró que visitará las regiones más lejanas del paísFoto Ap y Xinhua
 
Periódico La Jornada
Lunes 2 de julio de 2012, p. 30

San Francisco de Yuruani-Maracay, Venezuela, 1° de julio. El mandatario venezolano, Hugo Chávez, dejó de lado este domingo sus problemas de salud al encabezar una caravana masiva por el interior del país, mientras el candidato opositor, Henrique Capriles, visitó dos pueblos remotos, al lanzar formalmente sus campañas rumbo a las elecciones presidenciales del 7 de octubre próximo.

Chávez –de camisa y boina roja, los colores distintivos de sus simpatizantes– hizo un recorrido por la zona centro-norte del país, mostrando así que tiene energía para la campaña, pese al cáncer que padece desde hace un año.

A lo largo de una marea roja de 18 kilómetros, que llevaba carteles de apoyo a Chávez y banderas venezolanas, el militar retirado –acompañado por sus colaboradores más cercanos– lanzó besos a la multitud, se golpeó el pecho en saludo a sus simpatizantes y alzó los brazos reiteradas veces con gesto triunfalista.

Al final del recorrido, en Maracay, pueblo donde empezó a fraguar su revolución socialista, se inició un acto cantando el himno nacional y con una fuerte arenga militar a la victoria. Arrancó el huracán bolivariano Hoy comienza el ataque. ¡Al ataque, pueblo de Venezuela!, expresó Chávez, quien lidera la mayoría de los sondeos, ante miles de simpatizantes bajo un intenso calor.

Chávez no soy yo, Chávez es un pueblo. Chávez somos millones. ¡Tú también eres Chávez, mujer venezolana! ¡Tú también eres Chávez, joven venezolano! ¡Tú también eres Chávez, niño velezolano!, aseveró el mandatario ante una multitud enardecida.

Los simpatizantes del gobierno realizaron vigilias en varias plazas del país para apoyar el inicio de la campaña de Chávez, mientras la oposición organizó 300 caravanas en la nación.

Por su parte, Capriles, joven ex gobernador que busca poner fin a 13 años de socialismo en el país petrolero, voló a dos pueblos fronterizos distantes, en un intento por resaltar lo que considera la ausencia del gobierno en las comunidades alejadas de Caracas.

En la remota población sudoriental de San Francisco de Yuruani –de la etnia pemón–, Capriles, quien llevaba una camisa con los colores de la bandera venezolana y en la cabeza una vincha con plumas, habló ante centenares de simpatizantes.

Mi compromiso es ir al (poblado) más olvidado, destacó Capriles con el monte Roraima de fondo, mientras algunos niños lo miraban desde lo alto de los árboles.

Aunque el domingo es el comienzo oficial de las campañas, Chávez y Capriles arengan a sus seguidores y buscan captar indecisos desde hace meses. El presidente, mediante largas cadenas de televisión, y Capriles, en recorridos casa por casa y con actos en todo el país. Chávez cuenta con una ventaja porcentual de dos dígitos, según la mayoría de las encuestas, para las elecciones del 7 de octubre, en las que buscará extender su mandato a casi 20 años, pero hay un alto nivel de indecisos, y un sondeo muy respetado mostró esta semana al mandatario y a Capriles cabeza con cabeza.

Luego de tres operaciones para remover dos tumores malignos durante un año de batalla contra el cáncer, Chávez, de 57 años, declaró en semanas recientes encontrarse bien de salud.

La mayoría de los analistas concuerdan en que la elección presidencial se encamina a ser la más cerrada desde que Chávez asumió, en 1999.

Los comicios tienen mucho en juego no sólo para Venezuela, país de 29 millones de habitantes y con las mayores reservas petroleras del mundo, sino también para la región, debido a los estrechos lazos comerciales y políticos que Chávez ha construido con aliados izquierdistas, entre ellos Cuba y Nicaragua.