Guadalajara, Jal., 4 de abril. Cientos de aficionados de Chivas acudieron al estadio Omnilife en busca de boletos, pero lo único que consiguieron fue un conato de bronca con las fuerzas de seguridad, mientras Érik Cubo Torres resumió el duelo ante el América: Viene un partido que hemos esperado desde el inicio del torneo, un clásico que no se puede perder. El domingo es ganar o ganar.

Los seguidores del club rojiblanco se presentaron en las taquillas del inmueble, a pesar que un día antes se informó que las entradas estaban agotadas, y sólo pudieron ingresar los que contaban con su contraseña de Internet, lo que provocó molestia en la mayoría que tenía varias horas formada en las largas filas.

Los inconformes estuvieron a punto de enfrentarse a golpes con los vigilantes, pero el altercado no llegó a mayores y los fanáticos, desanimados, se fueron retirando del lugar poco a poco.

En tanto, los cuatro seleccionados Sub-23 del Guadalajara ya se presentaron al entrenamiento. Marco Fabián, Miguel Ponce, Jorge Enríquez y Torres practicaron con el equipo y se reportaron listos, en caso de ser considerados por el técnico Ignacio Ambriz.

“Ahora tenemos que cambiar el chip. Debemos enfocarnos en nuestro club, entrenar bien y ganarnos un puesto para el partido del domingo”, dijo el Cubo.

Miguel Ponce, quien marcó el tanto de la victoria sobre Honduras, confía en seguir con la puntería afinada este domingo: Por supuesto que me gustaría anotar en el clásico, sería algo todavía más bonito, pero lo más importante será ganar.

Indicó que los seleccionados traemos un ritmo bastante bueno, esperamos tener participación y aportar nuestro granito de arena para salir con la victoria.

El conjunto tapatío también contará con Julio Nava, quien se recuperó de un golpe en el pie derecho.

El capitán Héctor Reynoso admitió que la clasificación está en juego, pero este partido es más que eso. Es la historia, el respeto a la gente que ha creado este clásico, y consideró que para obtener el triunfo será importante hacer valer nuestra casa, aprovechar el apoyo de nuestro público.

Con 20 clásicos disputados en sus 11 años de carrera, el defensa definió que este tipo de partidos se juegan con el corazón.