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Los símbolos presentados en The Wall Live buscan mostrar el sufrimiento que causan las guerras

No soy antisemita, afirma Roger Waters ante acusaciones de liga judío-estadunidense

Estoy contra la política exterior de Israel, no de su religión, aclara el ex Pink Floyd

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Roger Waters durante el concierto de apertura de la gira The Wall Live, en TorontoFoto Ap
The Independent
Periódico La Jornada
Miércoles 13 de octubre de 2010, p. 9

Treinta años después de enfrentar acusaciones de que corrompía a los niños con el álbum The Wall, de Pink Floyd, Roger Waters se ve obligado a defenderse de quienes lo tildan de antisemita.

El bajista ha lanzado una vigorosa defensa de sus opiniones y su música luego de que una agencia judío-estadunidense lo acusó de usar en su espectáculo escénico imágenes que promueven estereotipos.

Durante la interpretación de Goodbye Blue Sky en la parte estadunidense de su gira The Wall Live, que revive el álbum de 1979, se proyecta en pantalla un bombardero B52 que deja caer símbolos, entre ellos la estrella de David y el signo de dólares, así como un crucifijo y logotipos de Shell y Mercedes.

Abraham Foxman, director de la Liga Antidifamación, afirmó que poner en secuencia el signo de dólares y la estrella de David hace eco al estereotipo de que los judíos son avaros.

Críticas al trato a palestinos

En referencia a las críticas expresadas por Waters a Israel por su trato a los palestinos, Foxman sostuvo que el músico debería haber escogido otra forma de expresar sus opiniones políticas, sin traer a colación el peor y más antiguo estereotipo antisemita sobre la supuesta obsesión de los judíos por el dinero.

Waters, nacido en Surrey, Inglaterra, pero residente en Estados Unidos desde hace 10 años, señaló que la imputación es tan seria, que se sintió obligado a poner las cosas en claro mediante una carta abierta a The Independent.

“Observo el trabajo de los políticos en este país y en particular los del Partido Republicano. Funcionan bajo el axioma de que pueden decir cuantas mentiras quieran –y mientras más grandes mejor– y a la larga se las creerán”, expresó.

Si no respondo, los lectores verán la nota y creerán que soy antisemita, lo cual no es cierto. Nada más lejos de la verdad.

Las imágenes que eligió para proyectarlas durante el espectáculo –que se pesentará en México en diciembre– son representativas de intereses religiosos, nacionales y comerciales, todos los cuales tienen influencia maligna en nuestras vidas y nos impiden tratarnos con decencia unos a otros.

Waters ha hablado contra las políticas israelíes y acusó a la asociación de presentar a sus críticos como antisemitas. Es una pantalla para esconderse. No creo que se les deba tomar en serio. Se pueden atacar políticas israelíes sin ser antijudío, afirmó.

“Es como decir que si uno critica la política estadunidense es anticristiano. Critico la política israelí de ocupar tierra palestina y su política de construir asentamientos, lo cual es totalmente ilegal conforme al derecho internacional, y también de encerrar en guetos al pueblo en cuyas tierras están construyendo.

Estoy contra de su política exterior. No tiene nada que ver con la religión, sostuvo.

Waters señaló en su carta que los símbolos proyectados durante la presentación de The Wall llevan la intención de mostrar el sufrimiento que la guerra causa a la población civil.

El bajista precisó que muchas personas en Israel están de acuerdo con su posición y que ha recibido mucho apoyo de judíos. Existe un gran movimiento dentro de Israel, de ciudadanos judíos jóvenes y viejos, que están contra la política del gobierno, como ocurrió en Inglaterra cuando Tony Blair nos llevó a la guerra contra Irak a la retaguardia de George Bush, expresó.

“He tenido una respuesta extraordinaria –añadió–. Tuvimos más de mil comentarios en mi página de Facebook. El respaldo es extraordinario. Muchos de los comentarios han sido de judíos.”

© The Independent

Traducción: Jorge Anaya