El presunto narcotraficante Édgar Valdez Villarreal, La Barbie, quien desde el pasado sábado se encuentra cumpliendo un arraigo de 40 días, se desistió este martes de la demanda de garantías que sus abogados interpusieron durante el pasado fin de semana en contra de esa medida cautelar, según consta en registros oficiales del juzgado quinto de distrito de amparo.

En casos de personas detenidas por delincuencia organizada no es común que los inculpados renuncien a sus recursos de defensa legal. Eso ocurre, básicamente, cuando el inculpado llega a un acuerdo con la fiscalía o acepta convertirse en testigo protegido de la Procuraduría General de la República (PGR).

Vista la constancia de notificación personal realizada al quejoso Édgar Valdez Villarreal, por medio del cual se reserva su derecho de ratificar o no la demanda de garantías, en atención a ello notifíquese que fue su deseo no ratificar la demanda de amparo promovida en su favor, y que, de hecho, optó por su desistimiento, se lee en la lista de acuerdos publicada ayer en el juzgado quinto de distrito de amparo en el Distrito Federal.

Tortura sicológica

Los abogados de La Barbie presentaron el pasado sábado la demanda de amparo contra la PGR y otras autoridades policiacas y judiciales.

En la demanda, los litigantes aseguraban que su defendido supuestamente había sido privado de su libertad de manera ilegal, que habría sido sometido a actos de tortura sicológica y física durante su permanencia en las instalaciones de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), además de que habría sido arraigado sin que se cumplieran todos los requisitos que la ley penal ordena para conceder esa medida cautelar, según consta en el expediente 851/2010.

La petición de amparo de Valdez Villarreal recayó en el juzgado quinto de distrito en esa materia con sede en el Palacio de Justicia de San Lázaro.

Tres días después del arresto de Valdez Villarreal, autoridades de la Secretaría de Seguridad Pública federal revelaron a La Jornada información en el sentido de que el gobierno mexicano ofreció garantías a La Barbie, para que colaborara con la autoridad.

Según la información obtenida por este diario, el acuerdo incluye la posibilidad –si él lo desea– de no ser extraditado a Estados Unidos a cambio de que aceptara convertirse en testigo protegido de las autoridades mexicanas.